Conectarse
Últimos temas
Los posteadores más activos de la semana
No hay usuarios |
Panem RPG by Panem es un foro RPG creado por Peeta Mellark Cleaver y el resto de su Staff, surgido de la obra de Suzanne Collins The Hunger Games, no se permite copia, de imagenes, datos, estructura, de lo contrario será denunciado is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://www.foroactivo.com/. Tweets por @Panem918 PANEM PANEM
El Vagon número 12
2 participantes
Página 1 de 1.
El Vagon número 12
Nos encontramos de pie ante el Vagón numero 12, del Tren del Capitolio. las puertas siguen cerradas, y las dos máquinas están detenidas, es como si faltara alguien por llegar y no somos nosotros. Observo la estación del Distrito, es como si aquí no hubiera pobreza, es inmensa y un gran puente conecta los dos lados del andén.
Me imagino que aunque sea tan grande y tan bien decorada, no sabemos si sigue siendo la más pobre de todo el Estado de Panem, de hecho no tenemos noticias del resto de los Distritos, está prohibido tener contacto con ellos. Me noto observado, no se quien es o que es lo que me vigila, pero sé que algo me tiene la mirada fijada, busco por toda la estación, rastro de algún conocido, pero no hay nadie, solo consigo ver la sombra de algún hombre, barrigudo.
-¡Eh! Chico del Pan, ¡espabila! -Me increpa Katniss-
La miro a los ojos directamente, y centro la vista en Effie.
-Lo siento, pero me ha parecido que alguien me vigilaba.
-Cosas de crío. -Vuelve a increpar-
Finalmente las puertas se abren y Effie se dirige a nosotros.
-Vais a conocer el lujo, chicos. Espero que sepáis aprovecharlo, aunque estáis poco tiempo aquí dentro. Arañas de cristal, camas nuevas, comida exquisita y otras muchisimas cosas para vosotros.
Tengo que reconocer que Effie tiene un acento muy estridente, se te clava en el cerebro, pero en el fondo no es tan mala persona. Me cae bien.
Me giro a Katniss y la vuelvo a mirar a los ojos, me aparto un poco de la puerta y la dejo pasar delante, observo su vestido, un vestido de una sola pieza, de color gris, con un cinturón de la misma tela y.... ¿pero que lleva, que es eso, lo he visto antes?
-Katniss disculpa, ¿eso es un Sinsajo de Oro?
Pero ella no me devuelve respuesta, esto es genial, volvemos a las andadas, pero hice una promesa a Madge y se que es ella que le ha dado el broche, tengo que intentar confiar en Katniss y hacer equipo con ella si llega el momento que podamos entendernos. Al final Katniss accede, y pasa delante de mi pero tras no devolverme respuesta, hace lo mismo entrando en el vagón y levantando la barbilla como si su orgullo le impidiera hablar conmigo.
La visión que tenemos del vagón es como un sueño, la madera es increíble y una enorme cantidad ingente de comida, desde fuera el tren no parece tan espacioso, pero realmente engaña y es enorme. ME llaman la atención los pasteles y la bollería del Capitolio, me detengo en las mesas para comprobar el trabajo de la decoración.
-Me gustaría tener tiempo para conocer los pasteleros, este trabajo es perfecto. Pero, no habrá esa oportunidad. ¿Verdad, Effie?
-Oh, Peeta, lo siento, pero con el horario que tenemos no creo que haya tiempo, pero quizás pueda hacer algo. Seguidme os mostraré el resto del Vagón.
Atravesamos unas puertas correderas, y vemos una habitación para cada uno y otras dos para los "mentores", además vemos un cuarto de baño, también individual.
-Podéis hacer lo que queráis, pero debéis estar a punto para la cena, espero que sepáis comportaros.
Nos metemos cada uno en una habitación, lanzo un grito ahogado al ver la cantidad de ropa de los armarios vestidores, los trajes que aquí hay son increíbles. Elijo para la cena de esta noche un elegante traje color beige, y me meto en la ducha, me doy una ducha fría, para desentumecer los músculos y relajar la mente, y me aplico un extraño jabón de.... "rosas".
-Tiene gracia "me digo a mi mismo", tener un jabón para la habitación de un chico que es de rosas. -Y rompo a reír-
Automáticamente noto como el tren comienza su marcha, muy lentamente. Una vez limpio salgo de la ducha y me pongo el traje beige y una camisa de un color aceitunado, como el color de mi piel y salgo al comedor. Cuando llego al comedor, veo a Katniss con un camisa y pantalones verde oscuro, viene acompañada por Effie Trinkett, me siento en la mesa y ellas llegan a nuestra posición.
-¿Donde esta Haymitch? -Pregunta Effie-
-No lo he visto desde que se lo llevaron en camilla del escenario.
En ese momento Katniss y yo rompemos a reír. Me levanto y me acerco a ella, retirándole una silla. Y lo vuelvo a ver, el sinsajo de Madge. Katniss no acepta la silla y se sienta en la que estaba ocupada por mi, a mi derecha, yo frunzo el ceño y me siento a su izquierda, Effie se sienta justo enfrente de nosotros.
-¿El tren no va muy lento? -Pregunto-
-Tranquilo, dentro de nada se pondrá a su velocidad normal. -Responde Effie-
Y así es, de repente un fuerte tirón nos apoya y pega a las sillas, por supuesto nunca he ido en un tren y Katniss imagino que tampoco.
-Katniss, si no quieres hablarme lo entenderé, pero .... Sería mejor que nos entendiéramos, y trabajáramos juntos.
Me imagino que aunque sea tan grande y tan bien decorada, no sabemos si sigue siendo la más pobre de todo el Estado de Panem, de hecho no tenemos noticias del resto de los Distritos, está prohibido tener contacto con ellos. Me noto observado, no se quien es o que es lo que me vigila, pero sé que algo me tiene la mirada fijada, busco por toda la estación, rastro de algún conocido, pero no hay nadie, solo consigo ver la sombra de algún hombre, barrigudo.
-¡Eh! Chico del Pan, ¡espabila! -Me increpa Katniss-
La miro a los ojos directamente, y centro la vista en Effie.
-Lo siento, pero me ha parecido que alguien me vigilaba.
-Cosas de crío. -Vuelve a increpar-
Finalmente las puertas se abren y Effie se dirige a nosotros.
-Vais a conocer el lujo, chicos. Espero que sepáis aprovecharlo, aunque estáis poco tiempo aquí dentro. Arañas de cristal, camas nuevas, comida exquisita y otras muchisimas cosas para vosotros.
Tengo que reconocer que Effie tiene un acento muy estridente, se te clava en el cerebro, pero en el fondo no es tan mala persona. Me cae bien.
Me giro a Katniss y la vuelvo a mirar a los ojos, me aparto un poco de la puerta y la dejo pasar delante, observo su vestido, un vestido de una sola pieza, de color gris, con un cinturón de la misma tela y.... ¿pero que lleva, que es eso, lo he visto antes?
-Katniss disculpa, ¿eso es un Sinsajo de Oro?
Pero ella no me devuelve respuesta, esto es genial, volvemos a las andadas, pero hice una promesa a Madge y se que es ella que le ha dado el broche, tengo que intentar confiar en Katniss y hacer equipo con ella si llega el momento que podamos entendernos. Al final Katniss accede, y pasa delante de mi pero tras no devolverme respuesta, hace lo mismo entrando en el vagón y levantando la barbilla como si su orgullo le impidiera hablar conmigo.
La visión que tenemos del vagón es como un sueño, la madera es increíble y una enorme cantidad ingente de comida, desde fuera el tren no parece tan espacioso, pero realmente engaña y es enorme. ME llaman la atención los pasteles y la bollería del Capitolio, me detengo en las mesas para comprobar el trabajo de la decoración.
-Me gustaría tener tiempo para conocer los pasteleros, este trabajo es perfecto. Pero, no habrá esa oportunidad. ¿Verdad, Effie?
-Oh, Peeta, lo siento, pero con el horario que tenemos no creo que haya tiempo, pero quizás pueda hacer algo. Seguidme os mostraré el resto del Vagón.
Atravesamos unas puertas correderas, y vemos una habitación para cada uno y otras dos para los "mentores", además vemos un cuarto de baño, también individual.
-Podéis hacer lo que queráis, pero debéis estar a punto para la cena, espero que sepáis comportaros.
Nos metemos cada uno en una habitación, lanzo un grito ahogado al ver la cantidad de ropa de los armarios vestidores, los trajes que aquí hay son increíbles. Elijo para la cena de esta noche un elegante traje color beige, y me meto en la ducha, me doy una ducha fría, para desentumecer los músculos y relajar la mente, y me aplico un extraño jabón de.... "rosas".
-Tiene gracia "me digo a mi mismo", tener un jabón para la habitación de un chico que es de rosas. -Y rompo a reír-
Automáticamente noto como el tren comienza su marcha, muy lentamente. Una vez limpio salgo de la ducha y me pongo el traje beige y una camisa de un color aceitunado, como el color de mi piel y salgo al comedor. Cuando llego al comedor, veo a Katniss con un camisa y pantalones verde oscuro, viene acompañada por Effie Trinkett, me siento en la mesa y ellas llegan a nuestra posición.
-¿Donde esta Haymitch? -Pregunta Effie-
-No lo he visto desde que se lo llevaron en camilla del escenario.
En ese momento Katniss y yo rompemos a reír. Me levanto y me acerco a ella, retirándole una silla. Y lo vuelvo a ver, el sinsajo de Madge. Katniss no acepta la silla y se sienta en la que estaba ocupada por mi, a mi derecha, yo frunzo el ceño y me siento a su izquierda, Effie se sienta justo enfrente de nosotros.
-¿El tren no va muy lento? -Pregunto-
-Tranquilo, dentro de nada se pondrá a su velocidad normal. -Responde Effie-
Y así es, de repente un fuerte tirón nos apoya y pega a las sillas, por supuesto nunca he ido en un tren y Katniss imagino que tampoco.
-Katniss, si no quieres hablarme lo entenderé, pero .... Sería mejor que nos entendiéramos, y trabajáramos juntos.
Re: El Vagon número 12
Veo a los dos tributos míos en la entrada del tren, por supuesto me fijo un rato en ellos, asegurándome que no me ven, pero de repente, el chico se gira y como puedo me escondo tras la maquina trasera del tren.
-Maldita, sea.. este chico es... especial.
Consigo que me abran las puertas de la zona de la máquina del tren y me dirijo al vagón bar. Los veo entrar desde la distancia, y sigo pensando que el chico me gusta, parece que este año igual tendremos un poco de suerte, pero no quiero adelantarme. Me sirvo una copa y me la tomo, el tren empieza a moverse, supongo que hacia el distrito once. Que es nuestra siguiente parada, apenas me sostengo en pie, pero nadie más que yo, sabe lo que he pasado desde que gané los Quincuagésimos Juegos del Hambre, y no lo sabran, mientras yo esté vivo.
Pasan varias horas, sigo en el vagón bar, veo llegar a Effie y salgo por otra parte para no cruzármela, llego al vagón 12, y veo a los chicos ahí, posteriormente veo llegar a Effie tras de mi y se sienta a la mesa, con los dos tributos.
-Ahí teneis a vuestro mentor. -Dice con voz discordante-
Veo como lso dos se miran y yo me tambaleo, Effie consigue evitar mi cuerpo, y yo caigo al suelo de forma bochornosa, vomitando y rompiendo el vaso que llevaba en la mano, quedando inconsciente.
-Vamos, hay que llevarlo a su habitación. -Oigo decir-
-Dejalo Katniss, me ocupo yo.
-Maldita, sea.. este chico es... especial.
Consigo que me abran las puertas de la zona de la máquina del tren y me dirijo al vagón bar. Los veo entrar desde la distancia, y sigo pensando que el chico me gusta, parece que este año igual tendremos un poco de suerte, pero no quiero adelantarme. Me sirvo una copa y me la tomo, el tren empieza a moverse, supongo que hacia el distrito once. Que es nuestra siguiente parada, apenas me sostengo en pie, pero nadie más que yo, sabe lo que he pasado desde que gané los Quincuagésimos Juegos del Hambre, y no lo sabran, mientras yo esté vivo.
Pasan varias horas, sigo en el vagón bar, veo llegar a Effie y salgo por otra parte para no cruzármela, llego al vagón 12, y veo a los chicos ahí, posteriormente veo llegar a Effie tras de mi y se sienta a la mesa, con los dos tributos.
-Ahí teneis a vuestro mentor. -Dice con voz discordante-
Veo como lso dos se miran y yo me tambaleo, Effie consigue evitar mi cuerpo, y yo caigo al suelo de forma bochornosa, vomitando y rompiendo el vaso que llevaba en la mano, quedando inconsciente.
-Vamos, hay que llevarlo a su habitación. -Oigo decir-
-Dejalo Katniss, me ocupo yo.
Haymitch Abernathy- Mentor
- Mensajes : 211
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 20/10/2012
Re: El Vagon número 12
Vemos entrar a Haymitch por la puerta del vagón, y Effie por la trasera, ella se sienta a la mesa y Haymitch se tambalea por todo el vagón número 12.
-Ahí tenéis a vuestro mentor... borracho como siempre. -Dice Effie-
Los dos nos ponemos a reír, pero vemos como ella frunce el ceño y nos replica.
-Mejor que entendáis que si este... sigue así no conseguiréis llegar vivos al final de los juegos.
De repente Haymitch se desploma en el suelo, casi se lleva por delante a Effie Trinkett, pero ella se aparta de forma magistral.
-Ahí lo tenéis... vuestro mentor, rodeado de vómito y licor, no sabe hacer nada más que eso, sois el hazmerrerir de todo el Capitolio.
Los dos nos miramos y la conversación que teníamos antes de la aparición de nuestro mentor se queda en agua de borrajas, nos levantamos a la vez y le ayudamos a levantarse.
-Hay que llevarlo a su compartimento. -Dice Katniss, frunciendo el ceño- Y mejor que no salga de ahí, nunca.
-Katniss es nuestro mentor, el único que puede conseguirnos patrocinadores. Déjalo ya me ocupo yo.
Le tomo bajo mis hombros y lo llevo a su compartimento, noto como me moja la camisa, es igual, cuando le haya lavado ya me la cambiaré. Entro en el compartimento de HAymitch y lo meto en la ducha, y le doy una buena ducha fría, coloco su ropa a un lado y le preparo ropa limpia mientras se despeja.
Al cabo de una hora, noto como el tren empieza a bajar la velocidad y miro por la ventana, veo una enorme valla de hormigón que acaba con enormes hilos redondos de alambre, con espinas, vamos entrando a lo que debe ser otro de los Distritos y al cabo de unos minutos paramos en la estación.
-Ahí tenéis a vuestro mentor... borracho como siempre. -Dice Effie-
Los dos nos ponemos a reír, pero vemos como ella frunce el ceño y nos replica.
-Mejor que entendáis que si este... sigue así no conseguiréis llegar vivos al final de los juegos.
De repente Haymitch se desploma en el suelo, casi se lleva por delante a Effie Trinkett, pero ella se aparta de forma magistral.
-Ahí lo tenéis... vuestro mentor, rodeado de vómito y licor, no sabe hacer nada más que eso, sois el hazmerrerir de todo el Capitolio.
Los dos nos miramos y la conversación que teníamos antes de la aparición de nuestro mentor se queda en agua de borrajas, nos levantamos a la vez y le ayudamos a levantarse.
-Hay que llevarlo a su compartimento. -Dice Katniss, frunciendo el ceño- Y mejor que no salga de ahí, nunca.
-Katniss es nuestro mentor, el único que puede conseguirnos patrocinadores. Déjalo ya me ocupo yo.
Le tomo bajo mis hombros y lo llevo a su compartimento, noto como me moja la camisa, es igual, cuando le haya lavado ya me la cambiaré. Entro en el compartimento de HAymitch y lo meto en la ducha, y le doy una buena ducha fría, coloco su ropa a un lado y le preparo ropa limpia mientras se despeja.
Al cabo de una hora, noto como el tren empieza a bajar la velocidad y miro por la ventana, veo una enorme valla de hormigón que acaba con enormes hilos redondos de alambre, con espinas, vamos entrando a lo que debe ser otro de los Distritos y al cabo de unos minutos paramos en la estación.
Re: El Vagon número 12
Entramos a la estación de tren, era muy lujosa mucho mas que la habitación en donde estaba hacer un rato, todo estaba iluminado y el enorme tren estaba mas adelante, tenia los motores apagados asi que aun no saldríamos, aguardamos un poco ante las puertas hasta que en ese momento se abren para que entremos. El chico del pan estaba todo distraído o haciéndose el inocente, no se para que el sabe que lo conozco no era necesario eso ahora.
Paso y entro a aquel vagón, el numero 12 para nosotros, recorde lo que teníamos que pasar nosotros para poder conseguir algo de comida y ahora estando aquí me parecía algo despreciable, mientras unos mueren por hambre aquí sirven de mas y puedo asegurar que la mayoría la comida se daña. Habia mucha variedad de pasteles y a Peeta le había interesado mucho, yo simplemente me limitaba a responder.
Effie nos muestra nuestras habitaciones, yo entro a la mia y observo y me voy a dar una ducha.. El baño era precioso pero por un lado me daba una sensación de rechazo, de que este no era mi lugar. Me quito la ropa tomadome mi tiempo, entro en la ducha y abro el grifo dejo caer un poco de agua fria sobre mi cuerpo desnudo y luego abrió el grifo del agua caliente, se sentía bien me relajaba un poco después de la tensión que se vive afuera. Luego de minutos en la ducha, no sabia cuando exactamente, salgo y busco la ropa que me iba a poner, pero elijo lo primero que veo, un pantalón y una camisa verde oscuro y no podía faltar, el sinsajo que me dio Madge le prometí llevarlo conmigo y asi seria, me lo coloco donde me lo habia puesto ella y después de peinarme y dejarme el cabello suelto para que se secara, salgo de la habitación y voy hasta la parte del vagón que conocía, no me había dado cuenta que ya había empezado su marcha.
Veo por la ventana, todo pasaba muy rápido, escucho que alguien entraba y asi era Effie
- Oh! Hola querida no sabia que ya estaba aqui.-
- Si, solo veía... Por la ventana- digo pasando mi mano por mi nuca
En ese instante llega Peeta que se sienta en la mesa y me acerco al igual que Effie que empieza a preguntar por Haymitch lo cual eso nos hace reír por la ultima vez que lo vimos.
Luego de un rato aparece Haymitch todo borracho no era raro cosa que nos hace reír de nuevo... Peeta se hace cargo de el se lo lleva y vuelvo a quedar sola.
Como un poco una que otra cosita hasta que el vagon baja su velocidad cosa que me hace ver por la ventana, Peeta vuelve otra vez aparecer en la estancia y se acerca a mi lado a ver
- Otro distrito... Creo que pasan buscando los otro tributos- dice y yo le miro de reojo la verdad es que no quería fraternizar mucho aunque en donde estamos solo seriamos nosotros dos.
Paso y entro a aquel vagón, el numero 12 para nosotros, recorde lo que teníamos que pasar nosotros para poder conseguir algo de comida y ahora estando aquí me parecía algo despreciable, mientras unos mueren por hambre aquí sirven de mas y puedo asegurar que la mayoría la comida se daña. Habia mucha variedad de pasteles y a Peeta le había interesado mucho, yo simplemente me limitaba a responder.
Effie nos muestra nuestras habitaciones, yo entro a la mia y observo y me voy a dar una ducha.. El baño era precioso pero por un lado me daba una sensación de rechazo, de que este no era mi lugar. Me quito la ropa tomadome mi tiempo, entro en la ducha y abro el grifo dejo caer un poco de agua fria sobre mi cuerpo desnudo y luego abrió el grifo del agua caliente, se sentía bien me relajaba un poco después de la tensión que se vive afuera. Luego de minutos en la ducha, no sabia cuando exactamente, salgo y busco la ropa que me iba a poner, pero elijo lo primero que veo, un pantalón y una camisa verde oscuro y no podía faltar, el sinsajo que me dio Madge le prometí llevarlo conmigo y asi seria, me lo coloco donde me lo habia puesto ella y después de peinarme y dejarme el cabello suelto para que se secara, salgo de la habitación y voy hasta la parte del vagón que conocía, no me había dado cuenta que ya había empezado su marcha.
Veo por la ventana, todo pasaba muy rápido, escucho que alguien entraba y asi era Effie
- Oh! Hola querida no sabia que ya estaba aqui.-
- Si, solo veía... Por la ventana- digo pasando mi mano por mi nuca
En ese instante llega Peeta que se sienta en la mesa y me acerco al igual que Effie que empieza a preguntar por Haymitch lo cual eso nos hace reír por la ultima vez que lo vimos.
Luego de un rato aparece Haymitch todo borracho no era raro cosa que nos hace reír de nuevo... Peeta se hace cargo de el se lo lleva y vuelvo a quedar sola.
Como un poco una que otra cosita hasta que el vagon baja su velocidad cosa que me hace ver por la ventana, Peeta vuelve otra vez aparecer en la estancia y se acerca a mi lado a ver
- Otro distrito... Creo que pasan buscando los otro tributos- dice y yo le miro de reojo la verdad es que no quería fraternizar mucho aunque en donde estamos solo seriamos nosotros dos.
Invitado- Invitado
Re: El Vagon número 12
Ayudo a vestir a Haymitch y lo dejo en la cama para que acabe de despejarse, salgo de la habitación y entro en la mía, tomo una nueva camisa color marfil y me la pongo, justo al abrochármela noto ese olor, mezclado entre sudor, vómito y alcohol, así que decido desnudarme y pasarme bajo el agua tibia, odio ese olor, pero prefiero dar buena impresión a nuestro mentor. Ahora recuerdo las palabras de Katniss cuando me he llevado a Haymitch a la habitación:
"Hay que llevarlo a su compartimento, y mejor que no salga de ahí. Nunca"
Se que Katniss es arrogante y se que es buena persona en el fondo con su forma de ser, pero eso es lo que más me enamora de esa chica, a pesar de que a veces es insoportable, pero también lo ha pasado peor que el resto del Distrito 12. Salgo de la ducha, y me vuelvo a vestir con otro traje idéntico al anterior y la camisa marfil que había cogido y salgo al comedor del vagón 12, veo a Katniss cerca de uno de los ventanales, observando el paisaje y me acerco a ella.
- Otro distrito... Creo que pasan buscando los otros tributos. -La observo como me mira de reojo, sigue mirándome con esos aires de desdén que lleva dándome toda la vida- Creo que este es el Distrito 11.- Finalizo, justo cuando el tren se detiene en la estación.
-Estaremos poco tiempo parados, queridos, solo recogemos a los tributos y dentro de nada nos pondremos en marcha. -Canturrea Effie-
Le alargo la mano a Katniss e intento tomársela y acompañarla al sofá que hay justo a la derecha, pero ella no la acepta.
-Katniss...
-¿Qué? -increpa-
-En la Arena estaremos solos, los dos. Creo que sería mejor que nos lleváramos un poco mejor, ¿no crees?
Ella se gira dándome la espalda, no hay manera, si se cree que comportándose así obtendrá ayudas va muy equivocada, pero yo voy a seguir intentándolo.
-Están a punto de ofrecer la repetición de las demás cosechas, ¿por que no venís y cenamos un poco antes de verlas chicos?
Nos sentamos en la mesa, aún le veo en la mano izquierda el paquete que le dio a Katniss mi padre... es como si no quisiera soltarlo, ni siquiera parece haberlo vuelto a abrir desde que se lo dio mi padre. En ese momento notamos como la velocidad del tren va en aumento, acabamos de partir y en cuestión de minutos podemos estar en el siguiente Distrito.
Comenzamos la cena, una espesa sopa de zanahorias, chuletas de cordero y un puré de patatas.... y de postre, queso, frutas y tarta de chocolate.
Durante la cena Effie se fija que Haymitch no se ha presentado.
-¿Y Haymitch?
-Lo he dejado en la cama, despejándose.
-Ah, estupendo. -Responde- Por lo menos tenéis modales, no como los del año pasado, que consiguieron revolverme las tripas. -Espeta-
Los recuerdo, nos miramos los dos, de hecho los recordamos, esos dos chavales de la Veta nunca habían tenido lo suficiente para comer, y supongo que al ver toda esta comida se les olvidaron los modales.
Acabamos la comida y tras ese comentario de Effie, veo como Katniss se limpia las manos en los manteles, cosa que hace que Effie Trinkett frunza el ceño y retuerza sus labios en muestra de desaprobación.
Es el momento de ver las cosechas, nos sentamos en el sofá, los dos juntos y Effie en una butaca justo a mi lado, las cosechas se emiten desde el Distrito 1 hasta el distrito 12, los vemos todos y cada uno, es la primera vez que podemos ver a los Tributos de los demás distritos y los otros podrán ver también la señal, ya que se distribuye por todo el estado.
Lo que más la atención me llama son las del Distrito 2, un chico monstruoso, alto, musculoso se apresura a presentarse voluntario, luego una chica pelirroja del Distrito 5, y lo más inquietante, al menos para mi, es ver a una niña, de color oscuro y pelo moreno, con sus ojos en marrón oscuro, cuando sale elegida en el distrito 11 , tiene doce años, y a mi me recuerda mucho a la dulce y pequeña Prim, nadie se ofrece voluntario, por ultimo nuestras cosechas, como si estuviera ensayado, aparece Haymitch y lo vemos caerse, sale el nombre de Prim y Katniss se lanza a ofrecerse voluntaria para salvar a su hermana, lo que no vemos es el símbolo del 12 que le hicimos todos, el Capitolio ha cortado esa escena, luego sale mi nombre y me veo subir al escenario, nos damos la mano con Katniss.
-Deberiamos comentar las cosechas Katniss, hay que conocer más a nuestros adversarios, ¿no crees?
"Hay que llevarlo a su compartimento, y mejor que no salga de ahí. Nunca"
Se que Katniss es arrogante y se que es buena persona en el fondo con su forma de ser, pero eso es lo que más me enamora de esa chica, a pesar de que a veces es insoportable, pero también lo ha pasado peor que el resto del Distrito 12. Salgo de la ducha, y me vuelvo a vestir con otro traje idéntico al anterior y la camisa marfil que había cogido y salgo al comedor del vagón 12, veo a Katniss cerca de uno de los ventanales, observando el paisaje y me acerco a ella.
- Otro distrito... Creo que pasan buscando los otros tributos. -La observo como me mira de reojo, sigue mirándome con esos aires de desdén que lleva dándome toda la vida- Creo que este es el Distrito 11.- Finalizo, justo cuando el tren se detiene en la estación.
-Estaremos poco tiempo parados, queridos, solo recogemos a los tributos y dentro de nada nos pondremos en marcha. -Canturrea Effie-
Le alargo la mano a Katniss e intento tomársela y acompañarla al sofá que hay justo a la derecha, pero ella no la acepta.
-Katniss...
-¿Qué? -increpa-
-En la Arena estaremos solos, los dos. Creo que sería mejor que nos lleváramos un poco mejor, ¿no crees?
Ella se gira dándome la espalda, no hay manera, si se cree que comportándose así obtendrá ayudas va muy equivocada, pero yo voy a seguir intentándolo.
-Están a punto de ofrecer la repetición de las demás cosechas, ¿por que no venís y cenamos un poco antes de verlas chicos?
Nos sentamos en la mesa, aún le veo en la mano izquierda el paquete que le dio a Katniss mi padre... es como si no quisiera soltarlo, ni siquiera parece haberlo vuelto a abrir desde que se lo dio mi padre. En ese momento notamos como la velocidad del tren va en aumento, acabamos de partir y en cuestión de minutos podemos estar en el siguiente Distrito.
Comenzamos la cena, una espesa sopa de zanahorias, chuletas de cordero y un puré de patatas.... y de postre, queso, frutas y tarta de chocolate.
Durante la cena Effie se fija que Haymitch no se ha presentado.
-¿Y Haymitch?
-Lo he dejado en la cama, despejándose.
-Ah, estupendo. -Responde- Por lo menos tenéis modales, no como los del año pasado, que consiguieron revolverme las tripas. -Espeta-
Los recuerdo, nos miramos los dos, de hecho los recordamos, esos dos chavales de la Veta nunca habían tenido lo suficiente para comer, y supongo que al ver toda esta comida se les olvidaron los modales.
Acabamos la comida y tras ese comentario de Effie, veo como Katniss se limpia las manos en los manteles, cosa que hace que Effie Trinkett frunza el ceño y retuerza sus labios en muestra de desaprobación.
Es el momento de ver las cosechas, nos sentamos en el sofá, los dos juntos y Effie en una butaca justo a mi lado, las cosechas se emiten desde el Distrito 1 hasta el distrito 12, los vemos todos y cada uno, es la primera vez que podemos ver a los Tributos de los demás distritos y los otros podrán ver también la señal, ya que se distribuye por todo el estado.
Lo que más la atención me llama son las del Distrito 2, un chico monstruoso, alto, musculoso se apresura a presentarse voluntario, luego una chica pelirroja del Distrito 5, y lo más inquietante, al menos para mi, es ver a una niña, de color oscuro y pelo moreno, con sus ojos en marrón oscuro, cuando sale elegida en el distrito 11 , tiene doce años, y a mi me recuerda mucho a la dulce y pequeña Prim, nadie se ofrece voluntario, por ultimo nuestras cosechas, como si estuviera ensayado, aparece Haymitch y lo vemos caerse, sale el nombre de Prim y Katniss se lanza a ofrecerse voluntaria para salvar a su hermana, lo que no vemos es el símbolo del 12 que le hicimos todos, el Capitolio ha cortado esa escena, luego sale mi nombre y me veo subir al escenario, nos damos la mano con Katniss.
-Deberiamos comentar las cosechas Katniss, hay que conocer más a nuestros adversarios, ¿no crees?
Re: El Vagon número 12
Ella me mira con su típica cara de arrogante y no devuelve respuesta, está claro que no quiere no quiere nada para hacer conmigo, se levanta y toma el paquete de galletas de la mesa y se dirige a su compartimento, a mi se me escapa una leve sonrisa y me quedo viendo de nuevo las cosechas de los otros distritos, ya que la emisión es un diferido y las repiten cada cierto tiempo.
Al cabo de una hora me voy a la cama, espero que mañana podamos por fin conocer a Haymitch, sereno y sobrio, de lo contrario no podremos ser preparados antes de llegar al Capitolio.
-Effie, ¿cuanto queda para llegar al Capitolio?
-Supuestamente llegareis en no más de dos días. Peeta.
"Genial, contando el de hoy, tres días de viaje y aún no hemos hablado con Haymitch."
Me acuesto en mi compartimento, mientras oigo el suave deslizar de las ruedas del tren en los raíles y un suave ronroneo, apoyo la cabeza en la pared, y oigo la televisión del compartimento de Katniss y me hecho a reír.
-Parece que al final ha vuelto a visionar las cosechas, pero claro... a su modo. -Me digo-
De repente el tren se para por espacio de minutos, con la oscuridad no me he dado cuenta pero parece que hemos llegado a otro Distrito, este debe ser el 10, me desvisto y cojo uno de los pijamas de seda naranja que encuentro en los cajones de mi cómoda del compartimento y me arropo en la cama, noto como el tren vuelve a moverse, realmente solo hemos parado por espacio de cinco minutos y volvemos a seguir el trayecto, esta vez al Distrito nueve, esta noche me cuesta dormir muchísimo, no se me va de la cabeza las palabras de mi madre y me aparece la imagen de mis hermanos arrastrados por los pasillos tras haberse despedido de mi. Pero necesito quitarme eso de la cabeza ahora mismo, de lo contrario mañana no podré estar fresco para cuando veamos a Haymitch. Me obligo a cerrar los ojos, parece que he dormido una hora cuando oigo el canturreo de Effie gritando por el vagón.
-¡Vamos chicos! ¡Hoy nos espera un día, muy, muy importante!
Me levanto de un salto de la cama y me limpio la cara, me visto con una camisa simple blanca y unos pantalones parecidos a los de ayer, de las cosechas, en este caso son totalmente negros y salgo de la habitación, entro en el comedor del vagón 12 y me siento en la mesa del comedor, donde puedo ver un frutero lleno de comida y todo tipo de panes y bollería. Tomo un panecillo y en una taza me pongo, chocolate caliente, lo reconozco por que en la panadería a veces fundimos el chocolate para los pasteles y en ese momento entra Haymitch, tiene la cara roja e hinchada por los excesos del Alcohol del día anterior.
-Vaya... ¿al final anoche me perdí la cena? -Pronuncia sentándose en la mesa-
No puedo evitar reírme y me doy cuenta de que Effie dirige su mirada hacia mi.
-¡Sigue riéndote! -Me increpa-
Tiene razón me avergüenzo de lo que hizo ayer Haymitch y nada de lo que quizás haga o diga puede cambiarlo, comienzo a darle vueltas al panecillo y en ese momento entra Katniss en el vagón.
-Vamos, ven, ¡siéntate! -Grita Haymitch-
Ella lo hace y al momento sirven una enorme bandeja de patata frita y jamón, además de huevos, me doy cuenta que mira mi taza.
-Lo llaman chocolate caliente, está muy bueno.-Le digo, sonriéndole-
Haymitch saca una botella de plata de su bolsillo y la vuelca en su vaso que tiene ante el.
-Entonces como se supone que piensas aconsejarnos, ¿si siempre estas borracho? -Le increpa Katniss-
-¿Quieres un consejo? Sigue Viva. -Le responde, devolviendole la arrogancia y echándose a reír-
Noto como mi semblante se endurece, me he hartado de los excesos de Haymitch con el Alcohol, y miro a Katniss, por sus ojos se que ella le sorprende mi cambio de actitud, me levanto y le doy un fuerte bofetón al vaso de cristal de Haymitch tirándolo al suelo, rompiéndose en mil pedazos y derramando todo su interior por la moqueta y las alfombras del suelo, vuelvo a mi lugar y cuando tomo asiento, al girarme veo como el puño de Haymitch se empotra en mi mandíbula, en la parte izquierda de mi cara y me tira al suelo, ni siquiera he podido reaccionar, me ha pillado desprevenido totalmente, me intento incorporar, frunciendo más el ceño y veo como intenta coger el licor, pero Katniss le clava un cuchillo entre los dedos en la mesa evitándolo, meto la mano en el frutero y tomo hielo para ponerme, pero él se interpone.
-¡Quieto! No lo hagas, que salga el golpe, creerán que te has peleado con otro tributo antes de llegar a la arena.
-Eso es ilegal. -Respondo con tono duro-
-Solo si te pillan. -Responde- ¿Qué tenemos aquí, de verdad este año me han tocado un par de luchadores?
Katniss y yo nos miramos y nos quedamos quietos, finalmente me levanto del suelo y me pongo junto a mi compañera, mientras Haymitch nos mira como si fuéramos ganado a la venta. Mientras tanto, el tren se detiene de nuevo, justo cuando me ha golpeado hemos atravesado otra valla, llegando al distrito nueve.
Al cabo de una hora me voy a la cama, espero que mañana podamos por fin conocer a Haymitch, sereno y sobrio, de lo contrario no podremos ser preparados antes de llegar al Capitolio.
-Effie, ¿cuanto queda para llegar al Capitolio?
-Supuestamente llegareis en no más de dos días. Peeta.
"Genial, contando el de hoy, tres días de viaje y aún no hemos hablado con Haymitch."
Me acuesto en mi compartimento, mientras oigo el suave deslizar de las ruedas del tren en los raíles y un suave ronroneo, apoyo la cabeza en la pared, y oigo la televisión del compartimento de Katniss y me hecho a reír.
-Parece que al final ha vuelto a visionar las cosechas, pero claro... a su modo. -Me digo-
De repente el tren se para por espacio de minutos, con la oscuridad no me he dado cuenta pero parece que hemos llegado a otro Distrito, este debe ser el 10, me desvisto y cojo uno de los pijamas de seda naranja que encuentro en los cajones de mi cómoda del compartimento y me arropo en la cama, noto como el tren vuelve a moverse, realmente solo hemos parado por espacio de cinco minutos y volvemos a seguir el trayecto, esta vez al Distrito nueve, esta noche me cuesta dormir muchísimo, no se me va de la cabeza las palabras de mi madre y me aparece la imagen de mis hermanos arrastrados por los pasillos tras haberse despedido de mi. Pero necesito quitarme eso de la cabeza ahora mismo, de lo contrario mañana no podré estar fresco para cuando veamos a Haymitch. Me obligo a cerrar los ojos, parece que he dormido una hora cuando oigo el canturreo de Effie gritando por el vagón.
-¡Vamos chicos! ¡Hoy nos espera un día, muy, muy importante!
Me levanto de un salto de la cama y me limpio la cara, me visto con una camisa simple blanca y unos pantalones parecidos a los de ayer, de las cosechas, en este caso son totalmente negros y salgo de la habitación, entro en el comedor del vagón 12 y me siento en la mesa del comedor, donde puedo ver un frutero lleno de comida y todo tipo de panes y bollería. Tomo un panecillo y en una taza me pongo, chocolate caliente, lo reconozco por que en la panadería a veces fundimos el chocolate para los pasteles y en ese momento entra Haymitch, tiene la cara roja e hinchada por los excesos del Alcohol del día anterior.
-Vaya... ¿al final anoche me perdí la cena? -Pronuncia sentándose en la mesa-
No puedo evitar reírme y me doy cuenta de que Effie dirige su mirada hacia mi.
-¡Sigue riéndote! -Me increpa-
Tiene razón me avergüenzo de lo que hizo ayer Haymitch y nada de lo que quizás haga o diga puede cambiarlo, comienzo a darle vueltas al panecillo y en ese momento entra Katniss en el vagón.
-Vamos, ven, ¡siéntate! -Grita Haymitch-
Ella lo hace y al momento sirven una enorme bandeja de patata frita y jamón, además de huevos, me doy cuenta que mira mi taza.
-Lo llaman chocolate caliente, está muy bueno.-Le digo, sonriéndole-
Haymitch saca una botella de plata de su bolsillo y la vuelca en su vaso que tiene ante el.
-Entonces como se supone que piensas aconsejarnos, ¿si siempre estas borracho? -Le increpa Katniss-
-¿Quieres un consejo? Sigue Viva. -Le responde, devolviendole la arrogancia y echándose a reír-
Noto como mi semblante se endurece, me he hartado de los excesos de Haymitch con el Alcohol, y miro a Katniss, por sus ojos se que ella le sorprende mi cambio de actitud, me levanto y le doy un fuerte bofetón al vaso de cristal de Haymitch tirándolo al suelo, rompiéndose en mil pedazos y derramando todo su interior por la moqueta y las alfombras del suelo, vuelvo a mi lugar y cuando tomo asiento, al girarme veo como el puño de Haymitch se empotra en mi mandíbula, en la parte izquierda de mi cara y me tira al suelo, ni siquiera he podido reaccionar, me ha pillado desprevenido totalmente, me intento incorporar, frunciendo más el ceño y veo como intenta coger el licor, pero Katniss le clava un cuchillo entre los dedos en la mesa evitándolo, meto la mano en el frutero y tomo hielo para ponerme, pero él se interpone.
-¡Quieto! No lo hagas, que salga el golpe, creerán que te has peleado con otro tributo antes de llegar a la arena.
-Eso es ilegal. -Respondo con tono duro-
-Solo si te pillan. -Responde- ¿Qué tenemos aquí, de verdad este año me han tocado un par de luchadores?
Katniss y yo nos miramos y nos quedamos quietos, finalmente me levanto del suelo y me pongo junto a mi compañera, mientras Haymitch nos mira como si fuéramos ganado a la venta. Mientras tanto, el tren se detiene de nuevo, justo cuando me ha golpeado hemos atravesado otra valla, llegando al distrito nueve.
Re: El Vagon número 12
Aun llevaba en la mano aquellas galletas que me había dado en señor Mellark aun no sabia el porque me había regalados estas galletas, las observaba y me quedaba pensando en las razones pero aun no me imaginaba cual era la correcta.
Me levanto de donde estaba sentada y me dirijo, sin decir palabra alguna a Peeta, hacia la habitación que me tocaba. Coloco las galletas sobre la mesa que tenía en frente de la cama, me tumbo en ella y me quedo viendo el techo de la habitación, el tren se detiene en un andén para repostar. Me levanto y abro rápidamente la ventana, agarro las galletas que me había dado el padre de Peeta y las arrojo fuera y cierro el cristal de golpe. Se acabo, no quiero nada más de ninguno de los dos. Por desgracia el paquete de galletas cae al suelo y se abre sobre un grupo de dientes de león que hay junto a las visas. Solo lo veo un instante, porque el tren sale de nuevo, pero me basta con eso; es suficiente para recordarme aquel otro diente de león que vi en el patio del colegio hace algunos años… Me pongo a pensar de nuevo en lo que había sucedido durante el sorteo, no podía hacerme ver como la débil. Ya era tarde y me estaba pegando un poco de sueño, voy y busco una pijama y me la pongo para luego ir a la cama donde caigo en un sueño profundo.
Me despierto muy temprano como de costumbre pero no quería levantarme de la cama y ¿para que? Hoy no iba a salir de casa con Gale como solíamos hacerlo. Escucho la voz de Effie, espero unos minutos más en la cama y luego me levanto para ponerme ropa y salir. Entro en aquel comedor, estaban Effie, Haymitch y Peeta; estos últimos sentados en la mesa comiendo un poco.
- Vamos, ven, ¡sientate!- grita Haymitch
Esta vez obedezco y me siento y me sirvo el desayuno, y veo que hay de tomar y no me decido miro la taza que tiene Peeta y este me dice su contenido sonriente
- Entonces como se supone que piensas aconsejarnos, ¿si siempre estas borracho?- le pregunto
- ¿quieres un consejo? Sigue viva- responde Haymitch, y se echa a reir.
Miro a Peeta antes de recordar que no quiero tener nada que ver con el, y me sorprende encontrarme con una expresión muy dura, cuando normalmente parece tan amable. De repente, le pega un bofetón al vaso que Haymitch tiene en la mano, y el cristal se hace añicos en el suelo y desparrama el liquido rojo sangre hacia el fondo del vagon. Haymitch piensa un momento y le da un puñetazo a Peeta en la mandibula, tirándolo de la silla. Cuando se vuelve para coger el alcohol, clavo mi cuchillo en la mesa, entre su mano y la botella; casi le corto los dedos. Me preparo para rechazar un golpe que no llega; el hombre se echa hacia atrás y nos mira de reojo.
- Bueno ¿Qué tenemos aquí? ¿de verdad me han tocado un par de luchadores este año?
Peeta de levanta del suelo y se sienta nuevamente a mi lado, me doy cuenta de que, si quiero ganarme la atención de Haymitch, este es el momento adecuado para impresionarlo. Arranco el cuchillo de la mesa, lo cojo por la hoja y lo lanzo a la pared de enfrente; la verdad es que esperaba clavarlo con fuerza, pero se queda metido en el hueco entre dos paneles de madera, lo que me hace parecer mucho mejor de lo que soy. El tren baja la velocidad, ya había perdido la cuenta o no había prestado atención de cuantos distritos habíamos pasado.
- Vengan aquí los dos- nos pide Haymitch, señalando con la cabeza al centro de la habitación. Obedecemos, y el da vueltas a nuestro alrededor, tocándonos como si fuésemos animales, comprobando nuestros musculos y examinándonos la cara – Bueno no esta todo perdido. Parecen en forman y, cuando los agarren los estilistas, serán bastantes atractivos.- Peeta y yo no lo ponemos en duda, porque, aunque los juegos del hambre no son un concurso de belleza, los tributos con mejor aspecto siempre parecen conseguir mas patrocinadores – Esta bien hare un trato con ustedes: si no interfieren con mi bebida, prometo estar lo suficientemente sobrio para ayudarlos, siempre que hagan todo lo que les diga.
No es un gran trato, pero si un paso gigantesco con respecto a lo ocurrido hace diez minutos, cuando no teníamos guía alguna.
- Esta bien- Responde Peeta
- Pues ayúdanos. Cuando lleguemos a la arena, ¿Cuál es la mejor estrategia en la Cornucopia para alguien…?
- Cada cosa a su tiempo.-
- Pero…- Empiezo a protestar
- No hay peros que valgan, no se resistan- dice Haymitch
Me levanto de donde estaba sentada y me dirijo, sin decir palabra alguna a Peeta, hacia la habitación que me tocaba. Coloco las galletas sobre la mesa que tenía en frente de la cama, me tumbo en ella y me quedo viendo el techo de la habitación, el tren se detiene en un andén para repostar. Me levanto y abro rápidamente la ventana, agarro las galletas que me había dado el padre de Peeta y las arrojo fuera y cierro el cristal de golpe. Se acabo, no quiero nada más de ninguno de los dos. Por desgracia el paquete de galletas cae al suelo y se abre sobre un grupo de dientes de león que hay junto a las visas. Solo lo veo un instante, porque el tren sale de nuevo, pero me basta con eso; es suficiente para recordarme aquel otro diente de león que vi en el patio del colegio hace algunos años… Me pongo a pensar de nuevo en lo que había sucedido durante el sorteo, no podía hacerme ver como la débil. Ya era tarde y me estaba pegando un poco de sueño, voy y busco una pijama y me la pongo para luego ir a la cama donde caigo en un sueño profundo.
Me despierto muy temprano como de costumbre pero no quería levantarme de la cama y ¿para que? Hoy no iba a salir de casa con Gale como solíamos hacerlo. Escucho la voz de Effie, espero unos minutos más en la cama y luego me levanto para ponerme ropa y salir. Entro en aquel comedor, estaban Effie, Haymitch y Peeta; estos últimos sentados en la mesa comiendo un poco.
- Vamos, ven, ¡sientate!- grita Haymitch
Esta vez obedezco y me siento y me sirvo el desayuno, y veo que hay de tomar y no me decido miro la taza que tiene Peeta y este me dice su contenido sonriente
- Entonces como se supone que piensas aconsejarnos, ¿si siempre estas borracho?- le pregunto
- ¿quieres un consejo? Sigue viva- responde Haymitch, y se echa a reir.
Miro a Peeta antes de recordar que no quiero tener nada que ver con el, y me sorprende encontrarme con una expresión muy dura, cuando normalmente parece tan amable. De repente, le pega un bofetón al vaso que Haymitch tiene en la mano, y el cristal se hace añicos en el suelo y desparrama el liquido rojo sangre hacia el fondo del vagon. Haymitch piensa un momento y le da un puñetazo a Peeta en la mandibula, tirándolo de la silla. Cuando se vuelve para coger el alcohol, clavo mi cuchillo en la mesa, entre su mano y la botella; casi le corto los dedos. Me preparo para rechazar un golpe que no llega; el hombre se echa hacia atrás y nos mira de reojo.
- Bueno ¿Qué tenemos aquí? ¿de verdad me han tocado un par de luchadores este año?
Peeta de levanta del suelo y se sienta nuevamente a mi lado, me doy cuenta de que, si quiero ganarme la atención de Haymitch, este es el momento adecuado para impresionarlo. Arranco el cuchillo de la mesa, lo cojo por la hoja y lo lanzo a la pared de enfrente; la verdad es que esperaba clavarlo con fuerza, pero se queda metido en el hueco entre dos paneles de madera, lo que me hace parecer mucho mejor de lo que soy. El tren baja la velocidad, ya había perdido la cuenta o no había prestado atención de cuantos distritos habíamos pasado.
- Vengan aquí los dos- nos pide Haymitch, señalando con la cabeza al centro de la habitación. Obedecemos, y el da vueltas a nuestro alrededor, tocándonos como si fuésemos animales, comprobando nuestros musculos y examinándonos la cara – Bueno no esta todo perdido. Parecen en forman y, cuando los agarren los estilistas, serán bastantes atractivos.- Peeta y yo no lo ponemos en duda, porque, aunque los juegos del hambre no son un concurso de belleza, los tributos con mejor aspecto siempre parecen conseguir mas patrocinadores – Esta bien hare un trato con ustedes: si no interfieren con mi bebida, prometo estar lo suficientemente sobrio para ayudarlos, siempre que hagan todo lo que les diga.
No es un gran trato, pero si un paso gigantesco con respecto a lo ocurrido hace diez minutos, cuando no teníamos guía alguna.
- Esta bien- Responde Peeta
- Pues ayúdanos. Cuando lleguemos a la arena, ¿Cuál es la mejor estrategia en la Cornucopia para alguien…?
- Cada cosa a su tiempo.-
- Pero…- Empiezo a protestar
- No hay peros que valgan, no se resistan- dice Haymitch
Invitado- Invitado
Re: El Vagon número 12
Me encuentro con uno de ellos en el Vagón, me noto la cara hinchada, pero que más da. Llevo toda la vida tras los Quincuagésimos juegos del Hambre bebiendo y guardando un terrible secreto sobre mi y mi familia todo este tiempo y para que negarlo, me encanta la bebida del Capitolio. También está Effie vestida con un conjunto color marfil y los labios rojos pasion, con un lazo dorado en el pelo, enorme.
-Parece que anoche me perdí la cena, ¿verdad?
Effie se levanta y se acerca a mí saliendo del comedor en direccion al compartimento de la otra tributo, gritando improperios, lo reconozco para ella nunca soy ni he sido una persona normal, por spuesto es por culpa del alcohol, pero llegará un día que podremos llevarnos bastante bien, lo se. El chico rompe a reír hasta que que Effie lo hace callar increpándole. Pasan los minutos y entra la chica.
-Vamos, ven ¡sientate! -Le grito-
Ella accede y se sienta a la mesa, puedo observar que para esta chica los juegos ya han empezado y parece que pretende no llevarse demasiado bien con su compañero, un error, puesto que en la arena solo se tendrán a ellos mismos.
- Entonces como se supone que piensas aconsejarnos, ¿si siempre estas borracho?- Pregunta frinciendo el ceño-
Le miro a los ojos levantando el cuchillo que tengo en la mano mostrándoselo y le respondo arrogantemente.
-¿Quieres un consejo? Sigue viva. -y suelto una sonora carcajada-
Saco una petaca de plata del bolsillo interior de mi americana y la abro, vertiendo su contenido en el vaso de cristal que tengo delante.
-Esto de ser mentor, te deja.. agotado. -Espeto-
Lo que ocurre después es una prueba para mis chicos y para que negarlo, para mi. El chico se levanta de la mesa y me da un fuerte manotazo al vaso lanzándolo al fondo del vagón, rompiendose el cristal y derramando el líquido del interior por todo el vagón, me da la espalda y se sienta en su silla, me quedo mirando y pensando por unos segundos, hasta que cierro el puño y le doy un potente puñetazo en la mandibula y lo lanzo al suelo desde la silla, el intenta encararse a mí desde el suelo y se incorpora metiendo la mano en el frutero para tomar hielo.
-¡No! Déjalo, que salga el golpe, creeran que te has peleado con un tributo, incluso antes de llegar a la arena.
-Es ilegal. -Me espeta-
-Solo si te pillan.
Cuando voy a coger la botella del alcohol, la chica me clava un cuchillo entre los dedos, por milimetros no me corta los dedos.
-Vaya... has matado un mantel. -Me río-
-¡Era de Caoba! -Chilla Effie-
Me cuesta unos segundos reaccionar, veo como la chica espera un golpe de mí como el que he dado al chico, pero no lo hago.
-Vaya, vaya. ¿Que tenemos aquí? Parece que me han tocado un par de luchadores este año.
La chica toma el cuchillo de la mesa, e intenta impresionarme lanzándolo contra la pared, se le clava de no muy fuerte, pero entre dos tablas, puedo verle en su cara lo orgullosa que está.
-Muy bien, venid aqui.
Los observo durante unos minutos, compruebo sus músculos y su talante físico.
-Parece que no está todo perdido, cuando os hayan cogido los estilistas, sereis bastante atractivos, y encima los dos estais en forma.
Ellos asienten.
-Haremos un trato. Si no interferis en mi bebida, estaré lo suficientemente sobrio para sacaros de la cornucopia. Pero teneis que hacer todo lo que yo os diga, sin rechistar.
-Está bién. -dice el chico-
- Pues ayúdanos. Cuando lleguemos a la arena, ¿Cuál es la mejor estrategia en la Cornucopia para alguien…?
-Todo a su tiempo, preciosa.
-Pero....
-Sin Peros, hemos quedado que no os resistirais a nada.
Nos volvemos a sentar en la mesa, le miro la cara al chico, el golpe le empieza a salir, pero por alguna razón no le he roto el labio, me da la sensación que no es la primera vez que recibe un golpe como este.
-Parece que anoche me perdí la cena, ¿verdad?
Effie se levanta y se acerca a mí saliendo del comedor en direccion al compartimento de la otra tributo, gritando improperios, lo reconozco para ella nunca soy ni he sido una persona normal, por spuesto es por culpa del alcohol, pero llegará un día que podremos llevarnos bastante bien, lo se. El chico rompe a reír hasta que que Effie lo hace callar increpándole. Pasan los minutos y entra la chica.
-Vamos, ven ¡sientate! -Le grito-
Ella accede y se sienta a la mesa, puedo observar que para esta chica los juegos ya han empezado y parece que pretende no llevarse demasiado bien con su compañero, un error, puesto que en la arena solo se tendrán a ellos mismos.
- Entonces como se supone que piensas aconsejarnos, ¿si siempre estas borracho?- Pregunta frinciendo el ceño-
Le miro a los ojos levantando el cuchillo que tengo en la mano mostrándoselo y le respondo arrogantemente.
-¿Quieres un consejo? Sigue viva. -y suelto una sonora carcajada-
Saco una petaca de plata del bolsillo interior de mi americana y la abro, vertiendo su contenido en el vaso de cristal que tengo delante.
-Esto de ser mentor, te deja.. agotado. -Espeto-
Lo que ocurre después es una prueba para mis chicos y para que negarlo, para mi. El chico se levanta de la mesa y me da un fuerte manotazo al vaso lanzándolo al fondo del vagón, rompiendose el cristal y derramando el líquido del interior por todo el vagón, me da la espalda y se sienta en su silla, me quedo mirando y pensando por unos segundos, hasta que cierro el puño y le doy un potente puñetazo en la mandibula y lo lanzo al suelo desde la silla, el intenta encararse a mí desde el suelo y se incorpora metiendo la mano en el frutero para tomar hielo.
-¡No! Déjalo, que salga el golpe, creeran que te has peleado con un tributo, incluso antes de llegar a la arena.
-Es ilegal. -Me espeta-
-Solo si te pillan.
Cuando voy a coger la botella del alcohol, la chica me clava un cuchillo entre los dedos, por milimetros no me corta los dedos.
-Vaya... has matado un mantel. -Me río-
-¡Era de Caoba! -Chilla Effie-
Me cuesta unos segundos reaccionar, veo como la chica espera un golpe de mí como el que he dado al chico, pero no lo hago.
-Vaya, vaya. ¿Que tenemos aquí? Parece que me han tocado un par de luchadores este año.
La chica toma el cuchillo de la mesa, e intenta impresionarme lanzándolo contra la pared, se le clava de no muy fuerte, pero entre dos tablas, puedo verle en su cara lo orgullosa que está.
-Muy bien, venid aqui.
Los observo durante unos minutos, compruebo sus músculos y su talante físico.
-Parece que no está todo perdido, cuando os hayan cogido los estilistas, sereis bastante atractivos, y encima los dos estais en forma.
Ellos asienten.
-Haremos un trato. Si no interferis en mi bebida, estaré lo suficientemente sobrio para sacaros de la cornucopia. Pero teneis que hacer todo lo que yo os diga, sin rechistar.
-Está bién. -dice el chico-
- Pues ayúdanos. Cuando lleguemos a la arena, ¿Cuál es la mejor estrategia en la Cornucopia para alguien…?
-Todo a su tiempo, preciosa.
-Pero....
-Sin Peros, hemos quedado que no os resistirais a nada.
Nos volvemos a sentar en la mesa, le miro la cara al chico, el golpe le empieza a salir, pero por alguna razón no le he roto el labio, me da la sensación que no es la primera vez que recibe un golpe como este.
Haymitch Abernathy- Mentor
- Mensajes : 211
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 20/10/2012
Re: El Vagon número 12
-¿Que pasa, Haymitch? ¿Sorprendido? -Le digo a nuestro mentor- Llevo muchos años sufriendo maltratos por parte de mi madre, un puñetazo no es nada comparado con golpes con un rodillo de amasar en la cara y cortes con sus uñas cada vez que me pegaba.
Los ojos de Haymitch no pueden ocultar su sorpresa, es la primera vez que me sincero con alguien que no conozco de nada.
-Y tu Katniss lo sabes, lo has visto en más de una ocasión durante estos últimos meses.
-Es verdad, ha recibido golpes bastante duros, más que ese. -Responde secamente-
-Solo me has pillado desprevenido, no volverá a pasar.
Nos sentamos de nuevo en la mesa y Haymitch coge el cuchillo que ha lanzado Katniss, mientras que yo me toco la mejilla, escuece, no puedo negarlo, pero los golpes de rodillo de mi madre dolían bastante más.
-¿Eres buena con el cuchillo? -pregunta Haymitch-
-Soy mejor con arco y flechas. -Responde Katniss-
Haymitch se sienta a la mesa y suelta el cuchillo sobre ella.
-De acuerdo, ¿como conseguimos refugio Haymitch? -Pregunto-
-Todo a su tiempo Peeta, todo a su tiempo.
-¿Entonces de que nos sirves? -Increpa Katniss- ¿Como conseguimos patrocinadores?
Haymitch se le gira y sonríe sarcásticamente.
-Cayéndole bien a la gente, preciosa. Cayéndole bien y tu, ahora mismo no vas por buen camino.
Entramos en un distrito más y me levanto para ir a la ventanilla, observo la gente del andén y les saludo, estamos en el Distrito 8.
-Yo de ti haria caso a tu compañero, el va por buen camino. -Finaliza Haymitch-
Los ojos de Haymitch no pueden ocultar su sorpresa, es la primera vez que me sincero con alguien que no conozco de nada.
-Y tu Katniss lo sabes, lo has visto en más de una ocasión durante estos últimos meses.
-Es verdad, ha recibido golpes bastante duros, más que ese. -Responde secamente-
-Solo me has pillado desprevenido, no volverá a pasar.
Nos sentamos de nuevo en la mesa y Haymitch coge el cuchillo que ha lanzado Katniss, mientras que yo me toco la mejilla, escuece, no puedo negarlo, pero los golpes de rodillo de mi madre dolían bastante más.
-¿Eres buena con el cuchillo? -pregunta Haymitch-
-Soy mejor con arco y flechas. -Responde Katniss-
Haymitch se sienta a la mesa y suelta el cuchillo sobre ella.
-De acuerdo, ¿como conseguimos refugio Haymitch? -Pregunto-
-Todo a su tiempo Peeta, todo a su tiempo.
-¿Entonces de que nos sirves? -Increpa Katniss- ¿Como conseguimos patrocinadores?
Haymitch se le gira y sonríe sarcásticamente.
-Cayéndole bien a la gente, preciosa. Cayéndole bien y tu, ahora mismo no vas por buen camino.
Entramos en un distrito más y me levanto para ir a la ventanilla, observo la gente del andén y les saludo, estamos en el Distrito 8.
-Yo de ti haria caso a tu compañero, el va por buen camino. -Finaliza Haymitch-
Re: El Vagon número 12
Tras un leve baño de masas, veo que Katniss sigue en la mesa, toqueteando el cuchillo y Haymitch hablando con ella. Le sonrío nuevamente y me siento.
-Deberías probar de acercarte a la gente Katniss, sienta bien a uno mismo. -Le guiño el ojo y le sonrío-
-A ver esa cara. -Responde Effie-
-No... me toques, Effie. -Increpo-
Ella da dos pasos atrás, y me mira desconcertada, se que me he pasado, pero no quiero que me toque nadie.
Peeta, no te pongas así, si alguien debe... pagar por eso soy yo, no ella.
-Vamos a dejarnos de remilgos Haymitch, si no quieres ayudarnos con los patrocinadores, ni quieres aconsejarnos, ¿que es lo que quieres?
La cara de nuestro mentor cambia totalmente, por lo que veo estas palabras le han dolido y bastante, no está acostumbrado a tener dos Tributos y que encima sean luchadores.
-Está bien, cuando lleguemos, os pondrán en manos de los estilistas, y mi parte del trato los cuenta a ellos también. -Se gira hacia Katniss- Tu. Preciosa, dejarás que te hagan lo que tengan que hacerte, sin objeciones. ¡¿Queda claro?!
-Pero...
Miro a Katniss y le susurro.
-Katniss no te opongas, es lo mejor que tenemos, por una vez, hazme caso.
-No te metas... en mis asuntos. -Responde-
-Nunca escuchas... que le vamos a hacer. De acuerdo Haymitch, estoy de acuerdo, que me hagan lo que tengan que hacerme. -Respondo-
-De las entrevistas ya hablaremos del tema, ahora mismo no es el momento. Después iréis a los entrenamientos, preparados para cualquier cosa, algo me dice que puede que este año haya algún cambio.
-De acuerdo.
En ese momento me levanto.
-Disculpad necesito estirar las piernas.
Ellos asienten, y me paro ante Effie.
-Oye Effie...
-Si. Dime. -Me responde frunciendo el ceño-
-Mira lo siento, estaba furioso por el momento, Haymitch tiene razón, debería pagarlo con él. No contigo.
Ella se levanta y me pone la mano sobre el pelo y me acaricia, bajando la mano hasta la mejilla derecha.
-Tranquilo Peeta. -Me coge de un hombro y me gira hacia la otra parte del vagón y susurra- Entre tu y yo. Haymitch es insoportable, dudo que os pueda ayudar, pero si el ha prometido eso, aunque tenga que apuntarle con una pistola os ayudara.
-Gracias Effie. -Y me hecho a reír-
-Deberías probar de acercarte a la gente Katniss, sienta bien a uno mismo. -Le guiño el ojo y le sonrío-
-A ver esa cara. -Responde Effie-
-No... me toques, Effie. -Increpo-
Ella da dos pasos atrás, y me mira desconcertada, se que me he pasado, pero no quiero que me toque nadie.
Peeta, no te pongas así, si alguien debe... pagar por eso soy yo, no ella.
-Vamos a dejarnos de remilgos Haymitch, si no quieres ayudarnos con los patrocinadores, ni quieres aconsejarnos, ¿que es lo que quieres?
La cara de nuestro mentor cambia totalmente, por lo que veo estas palabras le han dolido y bastante, no está acostumbrado a tener dos Tributos y que encima sean luchadores.
-Está bien, cuando lleguemos, os pondrán en manos de los estilistas, y mi parte del trato los cuenta a ellos también. -Se gira hacia Katniss- Tu. Preciosa, dejarás que te hagan lo que tengan que hacerte, sin objeciones. ¡¿Queda claro?!
-Pero...
Miro a Katniss y le susurro.
-Katniss no te opongas, es lo mejor que tenemos, por una vez, hazme caso.
-No te metas... en mis asuntos. -Responde-
-Nunca escuchas... que le vamos a hacer. De acuerdo Haymitch, estoy de acuerdo, que me hagan lo que tengan que hacerme. -Respondo-
-De las entrevistas ya hablaremos del tema, ahora mismo no es el momento. Después iréis a los entrenamientos, preparados para cualquier cosa, algo me dice que puede que este año haya algún cambio.
-De acuerdo.
En ese momento me levanto.
-Disculpad necesito estirar las piernas.
Ellos asienten, y me paro ante Effie.
-Oye Effie...
-Si. Dime. -Me responde frunciendo el ceño-
-Mira lo siento, estaba furioso por el momento, Haymitch tiene razón, debería pagarlo con él. No contigo.
Ella se levanta y me pone la mano sobre el pelo y me acaricia, bajando la mano hasta la mejilla derecha.
-Tranquilo Peeta. -Me coge de un hombro y me gira hacia la otra parte del vagón y susurra- Entre tu y yo. Haymitch es insoportable, dudo que os pueda ayudar, pero si el ha prometido eso, aunque tenga que apuntarle con una pistola os ayudara.
-Gracias Effie. -Y me hecho a reír-
Re: El Vagon número 12
Peetaa se levanta y habla cn Effie, por mi mente solo pasa aquello que había dicho Haymitch, me imaginaba todo aquello que le hacían a uno en el capitolio y sin quejarme tenia que acceder a todo cosa que no iba conmigo pero creo que a partir de ahora tenia que cambiar un poco debido a la situacion en la que ahora me encontraba al igual que Peeta.
En ese momento un hombre de vestimenta muy formal entra al vagón 12, Haymitch un poco tambaleante se levanta y Effie también, yo solo me le quedo mirando y luego a Peeta sucesivamente.
- Haymitch Abernathy?- Dice el hombre con voz gruesa
- Si... Ese soy yo...- Haymitch se rie a carcajadas y nos mira a todos
El hombre se acerca a el y le entrega un sobre dorado sellado con el sello del capitolio
- Vaya!- Exclama Haymitch y se encarga de abrir aquel sobre, este lo ojea y media un rato, luego asiente con la cabeza al hombre que habia traido el sobre y este se retira
- Que dice?- Digo levantandome
- Pues tienen una invitación...-
En ese momento un hombre de vestimenta muy formal entra al vagón 12, Haymitch un poco tambaleante se levanta y Effie también, yo solo me le quedo mirando y luego a Peeta sucesivamente.
- Haymitch Abernathy?- Dice el hombre con voz gruesa
- Si... Ese soy yo...- Haymitch se rie a carcajadas y nos mira a todos
El hombre se acerca a el y le entrega un sobre dorado sellado con el sello del capitolio
- Vaya!- Exclama Haymitch y se encarga de abrir aquel sobre, este lo ojea y media un rato, luego asiente con la cabeza al hombre que habia traido el sobre y este se retira
- Que dice?- Digo levantandome
- Pues tienen una invitación...-
Invitado- Invitado
Re: El Vagon número 12
Recibo el sobre dorado y lacrado de manos de aquel hombre del tren y lo abro. Miro a Effie y le hagouna seña para que se siente a la mesa con nosotros.
-¡Vaya! Al parecer teneis una invitación personal del Capitolio.
Veo como Peeta se acerca a nosotros y se apoya sobre la mesa.
-¿¡Que!? -Espeta-
-Sí. -Asiento- Según esta nota teneis reservado el vagón comedor del tren para vosotros dos solos, como una invitación a comer o cenar íntimamente en ese vagón.
-Pero... no podemos pasar a los otros vagones. -Dice Peeta-
-Un momento. Un momento, ¡chicos! -Dice Effie- Hay un pasillo... que comunica directamente el Vagon comedor con este... si el ¡Capitolio! quiere que comais o ceneis ahí es por que podeis usar ese pasillo.
Veo como Katniss no muestra tanta pasión por la invitación.
-Esto es una trampa, lo se.
-Sea una trampa o no lo sea Katniss, es una invitación, debemos ir. -Responde Peeta-
-Te lo he dicho antes. Preciosa, si quieres sobrevivir has de caer bien a la gente y quizás esta sea una forma, hazle caso el va por el buen camino.
Se quedan los dos pensativos, hasta que Peeta le toma la mano a su compañera y la levanta.
-Vamos Katniss no podemos perder nada, quizás sea algo bueno para ti y para mi.
-Esta bien. -Responde secamente ella-
-Iros a vuestros cuartos será comida. Arreglaros.
En ese momento paramos en la estacion del Distrito 7.
-¡Vaya! Al parecer teneis una invitación personal del Capitolio.
Veo como Peeta se acerca a nosotros y se apoya sobre la mesa.
-¿¡Que!? -Espeta-
-Sí. -Asiento- Según esta nota teneis reservado el vagón comedor del tren para vosotros dos solos, como una invitación a comer o cenar íntimamente en ese vagón.
-Pero... no podemos pasar a los otros vagones. -Dice Peeta-
-Un momento. Un momento, ¡chicos! -Dice Effie- Hay un pasillo... que comunica directamente el Vagon comedor con este... si el ¡Capitolio! quiere que comais o ceneis ahí es por que podeis usar ese pasillo.
Veo como Katniss no muestra tanta pasión por la invitación.
-Esto es una trampa, lo se.
-Sea una trampa o no lo sea Katniss, es una invitación, debemos ir. -Responde Peeta-
-Te lo he dicho antes. Preciosa, si quieres sobrevivir has de caer bien a la gente y quizás esta sea una forma, hazle caso el va por el buen camino.
Se quedan los dos pensativos, hasta que Peeta le toma la mano a su compañera y la levanta.
-Vamos Katniss no podemos perder nada, quizás sea algo bueno para ti y para mi.
-Esta bien. -Responde secamente ella-
-Iros a vuestros cuartos será comida. Arreglaros.
En ese momento paramos en la estacion del Distrito 7.
Haymitch Abernathy- Mentor
- Mensajes : 211
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 20/10/2012
Re: El Vagon número 12
-¿Pero que está pretendiendo el Capitolio...? -Caigo sentado en la silla de la mesa tras el anuncio de Haymitch-
Nos miramos los cuatro a las caras y puedo ver la expresión de Katniss, es comprensible.
-Eso es una trampa. -Responde secamente-
Me quedo pensativo unos instantes, puede que sea una trampa, pero una invitación es una invitación y en mis pensamientos acepto.
-Sea o no una trampa, hay que aceptarla, es una invitación.
Nos quedamos algo pensativos, hasta que me levanto y le tomo la mano, ella me la suelta a regañadientes, pero yo insisto y ella me la da, la ayudo a levantarse de la silla.
-Vamos Katniss no podemos perder nada, quizás sea algo bueno para ti y para mi.
-Esta bien. -Responde secamente ella-
-Iros a vuestros cuartos será comida. Arreglaros. -Dice Haymitch-
Nos vamos a nuestros compartimentos, en ese momento el tren para en otro anden, hemos pasado una valla y es el distrito siete, estamos casi a mitad de camino. Me ducho y me relajo en la cama unos minutos, saco del armario un traje color naranja "pero como los naranjas de las puestas de sol" y me lo pongo, añado una camisa color beige y salgo hacia el comedor del Vagón 12. Espero unos minutos hasta que veo a Katniss, está radiante con un vestido azul brillante y su pelo suelto.
-Muy bien queridos, tomad esta puerta, el pasillo va directo. -Dice Effie-
Nos damos la mano y pasamos por el pasillo, vemos como el tren va tomando velocidad, dirigiéndose al Distrito seis.
-Esto será una trampa Peeta, deberías saberlo ya.
-Y ¿que? -respondo- No pueden hacernos nada, ya lo harán en los Juegos, por ahora disfrutemos.
Tras unos minutos de paso por el pasillo especial llegamos al comedor, es aún más lujos que el nuestro, pero... lo encontramos lleno de cámaras del Capitolio y nos miramos los dos. Katniss tenia razón. Era una trampa.
SIGUE EN EL VAGÓN COMEDOR
Nos miramos los cuatro a las caras y puedo ver la expresión de Katniss, es comprensible.
-Eso es una trampa. -Responde secamente-
Me quedo pensativo unos instantes, puede que sea una trampa, pero una invitación es una invitación y en mis pensamientos acepto.
-Sea o no una trampa, hay que aceptarla, es una invitación.
Nos quedamos algo pensativos, hasta que me levanto y le tomo la mano, ella me la suelta a regañadientes, pero yo insisto y ella me la da, la ayudo a levantarse de la silla.
-Vamos Katniss no podemos perder nada, quizás sea algo bueno para ti y para mi.
-Esta bien. -Responde secamente ella-
-Iros a vuestros cuartos será comida. Arreglaros. -Dice Haymitch-
Nos vamos a nuestros compartimentos, en ese momento el tren para en otro anden, hemos pasado una valla y es el distrito siete, estamos casi a mitad de camino. Me ducho y me relajo en la cama unos minutos, saco del armario un traje color naranja "pero como los naranjas de las puestas de sol" y me lo pongo, añado una camisa color beige y salgo hacia el comedor del Vagón 12. Espero unos minutos hasta que veo a Katniss, está radiante con un vestido azul brillante y su pelo suelto.
-Muy bien queridos, tomad esta puerta, el pasillo va directo. -Dice Effie-
Nos damos la mano y pasamos por el pasillo, vemos como el tren va tomando velocidad, dirigiéndose al Distrito seis.
-Esto será una trampa Peeta, deberías saberlo ya.
-Y ¿que? -respondo- No pueden hacernos nada, ya lo harán en los Juegos, por ahora disfrutemos.
Tras unos minutos de paso por el pasillo especial llegamos al comedor, es aún más lujos que el nuestro, pero... lo encontramos lleno de cámaras del Capitolio y nos miramos los dos. Katniss tenia razón. Era una trampa.
SIGUE EN EL VAGÓN COMEDOR
Re: El Vagon número 12
Mientras los dos siguen en el vagón comedor el tren prosigue su marcha, llegando hasta el distrito 6, nos paramos un instante y arranca en cuestión de segundos...
-Supongo que el Capitolio cree que vamos justos de tiempo.
-¡No te des tanta importancia Haymitch! -Responde Effie-
Me levanto y comienzo a andar de un lado a otro del vagón, de repente me paro y tomo de nuevo la nota que nos ha traído el jefe de vagones. Y me pongo a repasarla.
-¿Haymitch?... ¿Qué pasa?
-La chica tenía razón esto era una trampa.... Estoy seguro de que el vagón comedor está repleta de cámaras.
-¿Y, que?
-Maldita sea Effie.... ¿Es que no te das cuenta de lo que pretende el Capitolio? Has visto alguna vez, hablar cordialmente tanto a Peeta como a Katniss?
-Ahora que lo dices... no. Ella se muestra distante con el chico.
-Veo que empiezas a entender. Deberíamos sacarlos de ahí, cualquier paso en falso....
Voy hacia la puerta dle pasillo extra e intento abrirla, pero no lo consigo. debe estar cerrada desde el otro lado o bien no se abre hasta que lo hace la otra puerta. Golpeo fuertemente el cristal y suelto un grito furioso y vuelvo a la mesa, pensando en lo que puede estar pasando al otro lado de ese pasillo.
-Supongo que el Capitolio cree que vamos justos de tiempo.
-¡No te des tanta importancia Haymitch! -Responde Effie-
Me levanto y comienzo a andar de un lado a otro del vagón, de repente me paro y tomo de nuevo la nota que nos ha traído el jefe de vagones. Y me pongo a repasarla.
-¿Haymitch?... ¿Qué pasa?
-La chica tenía razón esto era una trampa.... Estoy seguro de que el vagón comedor está repleta de cámaras.
-¿Y, que?
-Maldita sea Effie.... ¿Es que no te das cuenta de lo que pretende el Capitolio? Has visto alguna vez, hablar cordialmente tanto a Peeta como a Katniss?
-Ahora que lo dices... no. Ella se muestra distante con el chico.
-Veo que empiezas a entender. Deberíamos sacarlos de ahí, cualquier paso en falso....
Voy hacia la puerta dle pasillo extra e intento abrirla, pero no lo consigo. debe estar cerrada desde el otro lado o bien no se abre hasta que lo hace la otra puerta. Golpeo fuertemente el cristal y suelto un grito furioso y vuelvo a la mesa, pensando en lo que puede estar pasando al otro lado de ese pasillo.
Haymitch Abernathy- Mentor
- Mensajes : 211
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 20/10/2012
Re: El Vagon número 12
-Haymitch... ¡Haymitch! -Chilla Effie- Puedes verlo por la televisión... mira ahora estan ofreciendolo.
-Lo sabia.... -mi semblante se endurece- Ha sido una trampa en toda regla...
-Si, pero mira... no parecen ir tan mal.
Por la pantalla los veo divertidos, hasta podria decir... siendo amigos. Pero quien lleva la batuta ahora mismo es Peeta y ella se limita a hacerle caso en todo y seguirle la corriente.
-Sabia que el chico tenia madera. Me parece que tiene posibilidades de hacerse con la victoria. Tiene las cámaras ganadas y ahora mismo su compañera de Distrito, hasta parece simpatica.
En ese momento paramos en el distrito 4, al fondo vemos a lo lejos el faro del muelle y al cabo de unos minutos ponemos direccion al Distrito 3
-Lo sabia.... -mi semblante se endurece- Ha sido una trampa en toda regla...
-Si, pero mira... no parecen ir tan mal.
Por la pantalla los veo divertidos, hasta podria decir... siendo amigos. Pero quien lleva la batuta ahora mismo es Peeta y ella se limita a hacerle caso en todo y seguirle la corriente.
-Sabia que el chico tenia madera. Me parece que tiene posibilidades de hacerse con la victoria. Tiene las cámaras ganadas y ahora mismo su compañera de Distrito, hasta parece simpatica.
En ese momento paramos en el distrito 4, al fondo vemos a lo lejos el faro del muelle y al cabo de unos minutos ponemos direccion al Distrito 3
Haymitch Abernathy- Mentor
- Mensajes : 211
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 20/10/2012
Re: El Vagon número 12
EL TREN DEL CAPITOLIO: DÍA 2
EL VAGÓN NÚMERO 12 CON KATNISS EVERDEEN, PEETA MELLARK, HAYMITCH ABERNATHY Y EFFIE TRINKETT
Atravesamos la puerta de metal plateada que separa el pasillo del vagon número 12, y entramos en él. Haymitch lleva un vaso con un licor rojo sangre y varios cubos de hielo en su interior y se levanta del sillón en el que está sentado. Effie se encuentra sentada en la mesa de acompañante del fondo del vagón 12, arreglándose el maquillaje.
-Muy bien... hecho... -Dice Haymitch tambaleándose- No me has decepcionado... chaval.
Le esbozo una sonrisa y miro a Katniss, ella se revuelve y sigue caminando hacia el sofá donde está sentada Effie.
-Espera... preciosa. Aún tengo para ti.
-Ahórrate el sermón. A ver como piensas ayudarnos. -Responde secamente-
Veo como Effie la mira con muy mala cara, hace un momento era simpática pero ha vuelto esa Katniss arrogante y salvaje. Me acerco a ella.
-Katniss, por favor... no sabes que quiere decirte, así que al menos dale el beneficio de la duda. -Le digo-
-No quiero nada de ti. Chico del Pan, siempre he vivido por mi cuenta.....
Se para secamente y yo pongo los ojos en blanco... se lo que piensa, al menos intuyo que le viene a la cabeza, pero no pienso decirle nada.
-Preciosa, seguías perfectamente la corriente a tu compañero.. a Peeta, a quien tu.. descaradamente llamas Chico del Pan. Si no fuera por él, estoy seguro que aún no tendrías ningún patrocinador. ¿Sabes para que sirven? ¡Para salvarte la maldita vida!
Effie se levanta y se acerca a mí, mirando a Katniss.
-¿Sabes? deberías controlar esos modales.... -Le responde-
-¿Y que quieres? ¿que me parezca a ti? a la gente de.... ¿del maldito Capitolio? -Increpa-
Me acerco a ella y la tomo de los brazos, zarándeandola de delante a atrás y de atrás hacia adelante, está histérica y eso no podemos permitirlo. Se queda fría eso no se lo esperaba, se queda pasmada sentada donde antes estaba Effie.
-Vamos, chico, sentémonos a la mesa, Effie ven con nosotros. Dejadla que piense en lo que ha pasado.
Nos sentamos a la mesa y Effie nos mira.
-Adelante, ¿que tienes que decir de la comida Effiie? -Le pregunto sonriendo-
-Muy bien... hecho... -Dice Haymitch tambaleándose- No me has decepcionado... chaval.
Le esbozo una sonrisa y miro a Katniss, ella se revuelve y sigue caminando hacia el sofá donde está sentada Effie.
-Espera... preciosa. Aún tengo para ti.
-Ahórrate el sermón. A ver como piensas ayudarnos. -Responde secamente-
Veo como Effie la mira con muy mala cara, hace un momento era simpática pero ha vuelto esa Katniss arrogante y salvaje. Me acerco a ella.
-Katniss, por favor... no sabes que quiere decirte, así que al menos dale el beneficio de la duda. -Le digo-
-No quiero nada de ti. Chico del Pan, siempre he vivido por mi cuenta.....
Se para secamente y yo pongo los ojos en blanco... se lo que piensa, al menos intuyo que le viene a la cabeza, pero no pienso decirle nada.
-Preciosa, seguías perfectamente la corriente a tu compañero.. a Peeta, a quien tu.. descaradamente llamas Chico del Pan. Si no fuera por él, estoy seguro que aún no tendrías ningún patrocinador. ¿Sabes para que sirven? ¡Para salvarte la maldita vida!
Effie se levanta y se acerca a mí, mirando a Katniss.
-¿Sabes? deberías controlar esos modales.... -Le responde-
-¿Y que quieres? ¿que me parezca a ti? a la gente de.... ¿del maldito Capitolio? -Increpa-
Me acerco a ella y la tomo de los brazos, zarándeandola de delante a atrás y de atrás hacia adelante, está histérica y eso no podemos permitirlo. Se queda fría eso no se lo esperaba, se queda pasmada sentada donde antes estaba Effie.
-Vamos, chico, sentémonos a la mesa, Effie ven con nosotros. Dejadla que piense en lo que ha pasado.
Nos sentamos a la mesa y Effie nos mira.
-Adelante, ¿que tienes que decir de la comida Effiie? -Le pregunto sonriendo-
Peeta Mellark para https://panem.forosactivos.net
Última edición por Peeta Mellark el Miér Nov 28, 2012 12:23 am, editado 1 vez
Re: El Vagon número 12
Llegamos al vagon, al fin dejaria de finjir lo que no me gustaba, me sentia mas comoda sin sentir que millones de ojos nos estaban viendo. No se que cosa tenian Haytmich y Effie con Peeta que ahora todo lo que salia de su bocota era lo que se tenia que hacer, no era por ser egoista o algo por el estilo pero sinceramente sus "ideas" apestaban y mucho, eso de andar actuando lo que uno no era era detestable y aun mas si lo que tenia que finjir era una simpatia con el chico del pan, si asi le decia y diga lo que diga Haytmich no dejaria de decirselo yo podia cuidarme perfectamente bien yo solita no necesitaba de nadie y menos de el.
Tenia mucha rabia acumulada, tension y desesperacion; necesitaba estar sola y estos no me dejaban y no paraban de alajar lo bien que estuvimos, estupideses es lo que salian de sus bocas y no me iba a dejar guiar por locuras como esas. Si, en ese momento se me estaban saliendo muchas palabras que estilaban venemo del puro y ellos no entendian el porque, no me conocen asi que no saben lo que estaba pensando. Peeta me pedia que me calmara y la verdad no sabia porque lo decia si yo estaba totalmente calmada aunque si un poco irritada por la situacion. En un momento de descuido Peeta se me acerca y sin pensarlo me estampa una bofetada, me quedo paralizada por lo que hizo pero la rabia y la ira sentia como se apoderaba de mi cuerpo, aprete mis puños con fuerza que podia sentir como mis uñas se iban enterrando en la palma de mis manos.
Peeta se fue con Haytmich a sentarse, era la primera vez que me quedaba sin hacer nada ante semejante situacion pero no duraria mucho, mire a Effie que me hizo una mueca, me acerco con rapidez a Peeta que se encontraba sentado me paro tras de el, respiro profundo cerrando mis ojos y en un segundo despues los abro rapido y me doy cuenta que ya habia actuado; habia tomado a Peeta por sus cabellos echando su cabeza hacia atras, me inclino hacia el y le susurro al oido...
- Que sea la ultima... Escuchame bien, la ultima vez que tu me pones un dedo encima Peeta Mellark... ME ESCUCHASTE!?- miro a Haytmich que solo observaba lo que hacia, Peeta intenta asentir con la cabeza y al darme cuenta le suelto bruscamente.
Me repongo mirando a Haytmich que me regala una sonrisa torsida, sin mas que decir me encamino hacia mi habitacion y llego a escuchar lo que dice Haymich
- Es chica tiene agallas...- y le escucho reirse a carcajadas cosa que me hace sonreir triunfante.
Entro a mi habitacion y me lanzo a la cama, mis manos alborotan mi cabello que estaba sujeto en una coleta. Me estaba dando dolor de cabeza aun sentia esa rabia intensa que invadio mi cuerpo al Peeta darme esa bofetada
- Me la vas a pagar chico del pan...- me digo a mi misma, esa cena me habia dejado agotada y lo unico que queria hacer era dormir, me levanto en busca de mi pijama y me la pongo, voy al baño me lavo la cara y me la seco con una toalla, vuelvo a la cama y me pongo a pensar en que estariam haciendo mi madre, Prim, Gale y Madgi.
Tenia mucha rabia acumulada, tension y desesperacion; necesitaba estar sola y estos no me dejaban y no paraban de alajar lo bien que estuvimos, estupideses es lo que salian de sus bocas y no me iba a dejar guiar por locuras como esas. Si, en ese momento se me estaban saliendo muchas palabras que estilaban venemo del puro y ellos no entendian el porque, no me conocen asi que no saben lo que estaba pensando. Peeta me pedia que me calmara y la verdad no sabia porque lo decia si yo estaba totalmente calmada aunque si un poco irritada por la situacion. En un momento de descuido Peeta se me acerca y sin pensarlo me estampa una bofetada, me quedo paralizada por lo que hizo pero la rabia y la ira sentia como se apoderaba de mi cuerpo, aprete mis puños con fuerza que podia sentir como mis uñas se iban enterrando en la palma de mis manos.
Peeta se fue con Haytmich a sentarse, era la primera vez que me quedaba sin hacer nada ante semejante situacion pero no duraria mucho, mire a Effie que me hizo una mueca, me acerco con rapidez a Peeta que se encontraba sentado me paro tras de el, respiro profundo cerrando mis ojos y en un segundo despues los abro rapido y me doy cuenta que ya habia actuado; habia tomado a Peeta por sus cabellos echando su cabeza hacia atras, me inclino hacia el y le susurro al oido...
- Que sea la ultima... Escuchame bien, la ultima vez que tu me pones un dedo encima Peeta Mellark... ME ESCUCHASTE!?- miro a Haytmich que solo observaba lo que hacia, Peeta intenta asentir con la cabeza y al darme cuenta le suelto bruscamente.
Me repongo mirando a Haytmich que me regala una sonrisa torsida, sin mas que decir me encamino hacia mi habitacion y llego a escuchar lo que dice Haymich
- Es chica tiene agallas...- y le escucho reirse a carcajadas cosa que me hace sonreir triunfante.
Entro a mi habitacion y me lanzo a la cama, mis manos alborotan mi cabello que estaba sujeto en una coleta. Me estaba dando dolor de cabeza aun sentia esa rabia intensa que invadio mi cuerpo al Peeta darme esa bofetada
- Me la vas a pagar chico del pan...- me digo a mi misma, esa cena me habia dejado agotada y lo unico que queria hacer era dormir, me levanto en busca de mi pijama y me la pongo, voy al baño me lavo la cara y me la seco con una toalla, vuelvo a la cama y me pongo a pensar en que estariam haciendo mi madre, Prim, Gale y Madgi.
Invitado- Invitado
Re: El Vagon número 12
Entran los dos en el vagón, el chico está más o menos entero, por lo que hemos visto los dos en la televisión, él llevaba la batuta en la comida y ella le seguia la corriente. Pero al parecer la procesión va por dentro....
-Muy bien... hecho... -Digo tambaleándome- No me has decepcionado... chaval. Espera... preciosa. Aún tengo para ti.
-Ahórrate el sermón. A ver como piensas ayudarnos. -Responde secamente-
Frunzo el ceño, comienzo a cansarme de esa malhumorada cría. Peeta se acerca a ella y le pide que se calme, pero en un momento dado vemos como coge algo de la mesa cerca de Effie, la cual está retocándose el estridente maquillaje, y hace el amago de lanzarlo, Effie se levanta y se cruza con ella...
-No quiero nada de ti. Chico del Pan, siempre he vivido por mi cuenta..... -Le responde arrogante-
-Preciosa, seguías perfectamente la corriente a tu compañero, a quien tu... descaradamente llamas Chico del Pan. Si no fuera por él, estoy seguro que aún no tendrías ningún patrocinador. ¿Sabes para que sirven? ¡Para salvarte la maldita vida!
-Deberías mejorar tus modales. -Le increpa Effie-
Katniss lanza el objeto que no puedo llegar a indentificar al suelo, justo al lado del sofá donde estaba sentada Effie, lo que ocurre despues nos deja a todos atónitos, el chico se le acerca y la toma por los hombros, la gira y le zarandea por los brazos dejándola por un momento sin palabras, sentada en el sofá. Se vuelve y nos sentamos de nuevo Effie, Peeta y yo a la mesa, en ese momento entramos en el Distrito 3, y nos paramos unos segundos, al cabo de un minuto el tren vuelve a tomar velocidad hacia el Distrito 2.
Pasan unos instantes y seguimos hablando los tres en la mesa, Katniss se levanta y se dirige hacia nosotros, sigilosamente se coloca detras del chico y cierra los ojos. Puedo ver como su mano coge el dorado pelo rizado de Peeta y le tira hacia atras con todas sus fuerzas, aún así el chico muestra sangre fría y solo hace una leve mueca. La chica se acerca a su oído y le susurra un....
- Que sea la ultima... Escuchame bien, la ultima vez que tu me pones un dedo encima Peeta Mellark... ME ESCUCHASTE!?-
Entonces se gira observándome, no voy a meterme, el chico logra asentir y ella al darse cuenta lo suelta... Se gira y se marcha a su compartimento.
-Esta chica tiene agallas... -Mascullo y me pongo a reír-
Effie se levanta y se acerca a Peeta, quien se recoloca el pelo ondulado, que ha quedado algo maltrecho tras el tirón de ella.
-¿Estás bien querido? Esta chica es una maleducada. -Responde Effie-
-No te preocupes, llevo años viendo como pasa de mí y me hace desplantes, estoy acostumbrado.
-Tu también has tenido agallas, chico, cualquiera en tu situación no hubiera permitido que lo tratara así.
Peeta asiente, y encorva los hombros, mientras llegamos al Distrito 2, han pasado ya casi tres días desde que partimos del Distrito 12 y estamos a punto de llegar. Paramos en la estación y el tren reposta.
-Deberíamos irnos a dormir un poco, Durante el resto de la noche y mañana por la mañana llegaremos al Distrito 1 y unas horas después al Capitolio. -Digo, y todos nos levantamos y nos vamos a nuestros compartimentos-
-Muy bien... hecho... -Digo tambaleándome- No me has decepcionado... chaval. Espera... preciosa. Aún tengo para ti.
-Ahórrate el sermón. A ver como piensas ayudarnos. -Responde secamente-
Frunzo el ceño, comienzo a cansarme de esa malhumorada cría. Peeta se acerca a ella y le pide que se calme, pero en un momento dado vemos como coge algo de la mesa cerca de Effie, la cual está retocándose el estridente maquillaje, y hace el amago de lanzarlo, Effie se levanta y se cruza con ella...
-No quiero nada de ti. Chico del Pan, siempre he vivido por mi cuenta..... -Le responde arrogante-
-Preciosa, seguías perfectamente la corriente a tu compañero, a quien tu... descaradamente llamas Chico del Pan. Si no fuera por él, estoy seguro que aún no tendrías ningún patrocinador. ¿Sabes para que sirven? ¡Para salvarte la maldita vida!
-Deberías mejorar tus modales. -Le increpa Effie-
Katniss lanza el objeto que no puedo llegar a indentificar al suelo, justo al lado del sofá donde estaba sentada Effie, lo que ocurre despues nos deja a todos atónitos, el chico se le acerca y la toma por los hombros, la gira y le zarandea por los brazos dejándola por un momento sin palabras, sentada en el sofá. Se vuelve y nos sentamos de nuevo Effie, Peeta y yo a la mesa, en ese momento entramos en el Distrito 3, y nos paramos unos segundos, al cabo de un minuto el tren vuelve a tomar velocidad hacia el Distrito 2.
Pasan unos instantes y seguimos hablando los tres en la mesa, Katniss se levanta y se dirige hacia nosotros, sigilosamente se coloca detras del chico y cierra los ojos. Puedo ver como su mano coge el dorado pelo rizado de Peeta y le tira hacia atras con todas sus fuerzas, aún así el chico muestra sangre fría y solo hace una leve mueca. La chica se acerca a su oído y le susurra un....
- Que sea la ultima... Escuchame bien, la ultima vez que tu me pones un dedo encima Peeta Mellark... ME ESCUCHASTE!?-
Entonces se gira observándome, no voy a meterme, el chico logra asentir y ella al darse cuenta lo suelta... Se gira y se marcha a su compartimento.
-Esta chica tiene agallas... -Mascullo y me pongo a reír-
Effie se levanta y se acerca a Peeta, quien se recoloca el pelo ondulado, que ha quedado algo maltrecho tras el tirón de ella.
-¿Estás bien querido? Esta chica es una maleducada. -Responde Effie-
-No te preocupes, llevo años viendo como pasa de mí y me hace desplantes, estoy acostumbrado.
-Tu también has tenido agallas, chico, cualquiera en tu situación no hubiera permitido que lo tratara así.
Peeta asiente, y encorva los hombros, mientras llegamos al Distrito 2, han pasado ya casi tres días desde que partimos del Distrito 12 y estamos a punto de llegar. Paramos en la estación y el tren reposta.
-Deberíamos irnos a dormir un poco, Durante el resto de la noche y mañana por la mañana llegaremos al Distrito 1 y unas horas después al Capitolio. -Digo, y todos nos levantamos y nos vamos a nuestros compartimentos-
Haymitch Abernathy- Mentor
- Mensajes : 211
Reputación : 0
Fecha de inscripción : 20/10/2012
Re: El Vagon número 12
EL TREN DEL CAPITOLIO: DÍA 3 "LA LLEGADA"
EL VAGÓN NÚMERO 12 CON KATNISS EVERDEEN, HAYMITCH ABERNATHY, EFFIE TRINKETT Y PEETA MELLARK
La reacción de Katniss era de esperar, cuando me recoloco el pelo noto como la mano me queda con mechones del mismo, pegados en ella. A pesar de que ella no quería verlo, estaba en un estado nervioso desde que entramos en el vagón comedor, y aunque su carácter era ese, a mi no me gustaba como trataba a Effie, ya que, aunque ella era del Capitolio, no tenia la culpa de nada de lo que habia pasado durante ese día. Nos levantamos todos de la mesa y nos vamos a la cama, a nuestros compartimentos. Tengo ganas de pararme a la habitacion de Katniss y disculparme por lo sucedido, pero... no es el momento, ya lo hare cuando sea realmente el momento de hacerlo. me saco la americana y la lanzo sobre el taburete de delante de la cama y me meto en el baño, me doy una ducha e intento recuperar la compostura y recuperar mi maltrecho pelo rubio tras el tirón de Katniss, una vez lavado tomo uno de los pijamas de seda naranjas y me lo pongo, quiero meterme cuanto antes en la cama, pero desgraciadamente no tengo sueño. Me dispongo a observar un rato por el ventanal de mi compartimento, a la derecha veo las luces del Distrito dos, veo como se alejan.
-Ya queda menos para llegar al Capitolio. -pienso-
Paso unas horas observando un poco por el ventanal, hasta que me tiro sobre la cama e intento conciliar el sueño, esta noche para mí es de las peores, sueño con mis hermanos, y las últimas palabras que tuve con ellos, podría decirse que tengo una pesadilla, pero durante ese sueño no puedo moverme, me quedo petrificado, congelado de miedo. Noto como el tren vuelve a parar, parece que han pasado unos minutos desde que salimos del Distrito dos, pero miro el reloj de mi compartimento y puedo comprobar que han pasado ya cuatro horas desde ese momento. Al cabo de unos cuantos minutos el tren vuelve a arrancar, la última parada será el Capitolio, donde tenedremos contacto con el equipo de estilismo y preparación para los desfiles que tendrán lugar dentro de un par de días. Vuelvo a quedarme medio dormido y de repente me sobresalto.
-¡Vamos, vamos, vamos, hoy nos espera un día muy, muy importante! -Grita Effie por le vagón-
-¿Es que esta mujer nunca duerme? -Me pregunto-
Me levanto de la cama y me pongo una camisa blanca y unos pantalones negros con rayas, idénticos a los de la cosecha, de hace ya tres días, me lavo la cara y salgo del compartimento en dirección al comedor del vagón 12. Cuando llego, solo veo a Haymitch y Effie, Katniss aún no ha aparecido, me siento ante Haymitch y tomo unos bollos y una taza de chocolate caliente para desayunar.
-Buenos días. -Digo-
-Buenos días querido.
-Buenos días. Chico. Cuando tu compañera se decida a acompañarnos tenemos que hablar de los días siguientes a estos.
En ese momento Katniss entra en escena y se sienta a mi izquierda, levanto la mirada y le sonrío, ella me devuelve una fruncida de ceño. La entiendo con lo ocurrido ayer, pero deberia empezar a olvidar las cosas y centrarse en el presente y en el futuro.
-Bien Haymitch.... Tu dirás. -Le digo-
-Cuando lleguemos os llevaremos a vuestro piso en el centro de descanso, despues durante unos días tendreis encuentros con el equipo de preparación y conocereis a vuestros estilistas, hemos hecho un trato, ¿lo recordais? -Haymitch se gira mirando a Katniss- Si preciosa me refiero a tí. No me dijiste si accedías a cualquier cosa o no.
Ella cabecea y hace un amago de mirarme, en ese momento le asiento. Y ella me retira la mirada, Noto como Haymitch me mira.
-Está bien, acepto. -Masculla-
Pasan unas horas, y el vagón sigue en total silencio, ni siquiera me mira a la cara, esto me recuerda a los años antes de empezar a llevarle el pan hace apenas unas semanas, ojala pudiera decirle lo que realmente siento por ella, pero prefiero ahora mismo no hacerlo. Aunque en ese momento me vienen las palabras de Madge a la cabeza.
--"No sabemos con que te puedan salir por alla pero puedes destacar solo hay que saber como jugar las cartas y en eso estoy segura que puedes ser bueno, tienes a Katniss ella tambien es una chica muy astuta y lo sabes muy bien trata de congeniar con ella..."--
Cuanta razón tenía Madge... pero el trato con Katniss es muy complicado, quizás si tan solo pudiera explicarle mis verdaderos sentimientos podría conseguir que me hiciera el caso que espero y poder trabajar juntos, pero me repito a mi mismo que no es el momento adecuado.
-Mirad.... es enorme. -Digo observando una visión del Capitolio a través del ventanal.
Me levanto corriendo de la mesa y en ese momento todo se oscurece, debemos estar en el túnel, el cual fué decisivo en la última revolución hace setenta y cuatro años, los distritos no pudieron derrocar al Capitolio por que el tunel da una ventana imponente al mismo. Al cabo de unos minutos llegamos a la estación del tren, me giro a Katniss.
-¡Vamos, ven! saluda conmigo, ¡les va encantar!
Haymitch me mira y la mira a ella....
-Yo le haría caso... sabe lo que hace.
Ella duda, como es normal desde lo de ayer.... Me acerco a ella y la tomo de la mano.
-Vamos... hazme caso, ven.
Ella suelta mi mano de forma despectiva, pero acaba levantándose y se acerca a saludar conmigo en el ventanal. La gente vitorea nuestros saludos, nos los devuelve, me siento bien.
-Ves como no es tan malo, ¿Katniss?
Al cabo de unos largos minutos el tren se para y se abren las puertas, nos fijamos que no bajamos todos los tributos a la vez, si no que bajamos por turnos.
-Vamos, debemos ir hacia el centro de descanso para que os podais preparar para los estilistas. Los demás saldrán cuando el siguiente vagón haya sido desalojado. -Dice Effie-
Nos dirigimos al centro de descanso donde conoceremos a nuestros estilistas y podremos descansar un poco.
-Ya queda menos para llegar al Capitolio. -pienso-
Paso unas horas observando un poco por el ventanal, hasta que me tiro sobre la cama e intento conciliar el sueño, esta noche para mí es de las peores, sueño con mis hermanos, y las últimas palabras que tuve con ellos, podría decirse que tengo una pesadilla, pero durante ese sueño no puedo moverme, me quedo petrificado, congelado de miedo. Noto como el tren vuelve a parar, parece que han pasado unos minutos desde que salimos del Distrito dos, pero miro el reloj de mi compartimento y puedo comprobar que han pasado ya cuatro horas desde ese momento. Al cabo de unos cuantos minutos el tren vuelve a arrancar, la última parada será el Capitolio, donde tenedremos contacto con el equipo de estilismo y preparación para los desfiles que tendrán lugar dentro de un par de días. Vuelvo a quedarme medio dormido y de repente me sobresalto.
-¡Vamos, vamos, vamos, hoy nos espera un día muy, muy importante! -Grita Effie por le vagón-
-¿Es que esta mujer nunca duerme? -Me pregunto-
Me levanto de la cama y me pongo una camisa blanca y unos pantalones negros con rayas, idénticos a los de la cosecha, de hace ya tres días, me lavo la cara y salgo del compartimento en dirección al comedor del vagón 12. Cuando llego, solo veo a Haymitch y Effie, Katniss aún no ha aparecido, me siento ante Haymitch y tomo unos bollos y una taza de chocolate caliente para desayunar.
-Buenos días. -Digo-
-Buenos días querido.
-Buenos días. Chico. Cuando tu compañera se decida a acompañarnos tenemos que hablar de los días siguientes a estos.
En ese momento Katniss entra en escena y se sienta a mi izquierda, levanto la mirada y le sonrío, ella me devuelve una fruncida de ceño. La entiendo con lo ocurrido ayer, pero deberia empezar a olvidar las cosas y centrarse en el presente y en el futuro.
-Bien Haymitch.... Tu dirás. -Le digo-
-Cuando lleguemos os llevaremos a vuestro piso en el centro de descanso, despues durante unos días tendreis encuentros con el equipo de preparación y conocereis a vuestros estilistas, hemos hecho un trato, ¿lo recordais? -Haymitch se gira mirando a Katniss- Si preciosa me refiero a tí. No me dijiste si accedías a cualquier cosa o no.
Ella cabecea y hace un amago de mirarme, en ese momento le asiento. Y ella me retira la mirada, Noto como Haymitch me mira.
-Está bien, acepto. -Masculla-
Pasan unas horas, y el vagón sigue en total silencio, ni siquiera me mira a la cara, esto me recuerda a los años antes de empezar a llevarle el pan hace apenas unas semanas, ojala pudiera decirle lo que realmente siento por ella, pero prefiero ahora mismo no hacerlo. Aunque en ese momento me vienen las palabras de Madge a la cabeza.
--"No sabemos con que te puedan salir por alla pero puedes destacar solo hay que saber como jugar las cartas y en eso estoy segura que puedes ser bueno, tienes a Katniss ella tambien es una chica muy astuta y lo sabes muy bien trata de congeniar con ella..."--
Cuanta razón tenía Madge... pero el trato con Katniss es muy complicado, quizás si tan solo pudiera explicarle mis verdaderos sentimientos podría conseguir que me hiciera el caso que espero y poder trabajar juntos, pero me repito a mi mismo que no es el momento adecuado.
-Mirad.... es enorme. -Digo observando una visión del Capitolio a través del ventanal.
Me levanto corriendo de la mesa y en ese momento todo se oscurece, debemos estar en el túnel, el cual fué decisivo en la última revolución hace setenta y cuatro años, los distritos no pudieron derrocar al Capitolio por que el tunel da una ventana imponente al mismo. Al cabo de unos minutos llegamos a la estación del tren, me giro a Katniss.
-¡Vamos, ven! saluda conmigo, ¡les va encantar!
Haymitch me mira y la mira a ella....
-Yo le haría caso... sabe lo que hace.
Ella duda, como es normal desde lo de ayer.... Me acerco a ella y la tomo de la mano.
-Vamos... hazme caso, ven.
Ella suelta mi mano de forma despectiva, pero acaba levantándose y se acerca a saludar conmigo en el ventanal. La gente vitorea nuestros saludos, nos los devuelve, me siento bien.
-Ves como no es tan malo, ¿Katniss?
Al cabo de unos largos minutos el tren se para y se abren las puertas, nos fijamos que no bajamos todos los tributos a la vez, si no que bajamos por turnos.
-Vamos, debemos ir hacia el centro de descanso para que os podais preparar para los estilistas. Los demás saldrán cuando el siguiente vagón haya sido desalojado. -Dice Effie-
Nos dirigimos al centro de descanso donde conoceremos a nuestros estilistas y podremos descansar un poco.
SIGUE EN EL PISO 12 Y EN EL CENTRO DE PREPARACIÓN
Peeta Mellark para https://panem.forosactivos.net
Temas similares
» El vagón número 2
» El vagón número 1
» El Vagón Numero 5
» El Vagón Número 11
» La Invitacion del Vagón número 12
» El vagón número 1
» El Vagón Numero 5
» El Vagón Número 11
» La Invitacion del Vagón número 12
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér Jul 15, 2015 1:55 pm por Invitado
» Chica del Distrito 7 (nombre a elegir) [Reservada por MP hace unas horas]
Miér Abr 01, 2015 8:55 pm por Nerea
» The 100: We are survivors {Af. Élite DENEGADA}
Vie Feb 13, 2015 4:38 pm por Invitado
» De donde sois?
Mar Mayo 27, 2014 9:19 pm por Ronald Thompson
» Ronald Thompson, "Ron"
Mar Mayo 27, 2014 7:46 pm por Ronald Thompson
» CASA DE ENOBARIA
Jue Ene 02, 2014 2:05 pm por EnobariaDistrict2
» Registro de Avatares
Jue Ene 02, 2014 1:57 pm por EnobariaDistrict2
» Registros de Grupos
Lun Sep 30, 2013 1:19 pm por Invitado
» Registro de Infantes
Lun Sep 30, 2013 1:12 pm por Invitado