En la panadería

Vengo del bosque agotado, demasiadas emociones y casi ni un respiro. Entro en la panadería y busco cualquier indicio de dónde están mis padre. Nada. Me pongo manos a la obra, tengo que hacer el pan para el ritual. Empiezo a husmear para ver si encuentro todos los ingredientes. Harina, agua, levadura, sal, especias y nueces. Creo que lo tengo todo y empiezo a formar la masa. Añado las especias y las nueces y sigo amasando. Noto como me tiran los músculos de los brazos, tendré agujetas. Cuando acabo lo meto al horno de leña que utilizamos para encargos especiales. En el momento que lo meto al fuego oigo unos pasos y las voces de mi madre.
-¿Quién anda ahí? -pregunta enfadada y yo empiezo a temblar. 'Me va a pegar, me va a pegar' pienso.
-Soy Taylor. -respondo cauteloso.
-¿Taylor? ¿Qué haces en la panadería? -ahora la veo, está roja de rabia y con los puños cerrados. Busco una respuesta que la complazca.
-Estoy haciendo pan para el alcalde. Dentro de poco su hija cumple años y quería un buen pan. Además, ahora tenemos muchos pedidos y quería que el del alcalde estubiese terminado lo antes posible... Ya sabes, tiene mucho dinero. -la idea de ganar más dinero alegra a mi madre.
-De acuerdo. Sigue trabajando, yo voy a descansar un poco. -dice mientras se aleja. Cuando ya no la veo respiro más relajado.

Me asomo un poco al horno y el pan está perfectamente dorado. Lo saco y lo guardo en una panera donde se enfriará. Ahora que tengo tiempo me pongo a hacer unas cuantas galletas para glasearlas. Me aburro en la panadería, pero no puedo dejar que mis padres vean el pan antes de que lo guarde.

Entro a la panadería, para ayudar a Taylor, ya que Haymitcj me lo ha dicho.

-¿Hola? ¿Taylor?

Él aparece corriendo de la trastienda y me saluda.

-¿Necesitas ayuda? Me lo ha ordenado Haymitch.

Sigo glaseando unas galletas y entra alguien.
-¿Hola? ¿Taylor? -parece Gale. Corro hacia la puerta y lo saludo. -¿Necesitas ayuda? Me lo ha ordenado Haymitch.
-Sí, mira. -digo agarrándole del brazo y llevándolo a la trastienda. -Lleva estas galletas y este pan. -mira las galletas y parece que se las come con la mirada. -Puedes coger una si te apetece.

-Puedes coger una si te apetece- Esa frase no me parece una petición, y la tomo como una orden.
Está buenísima, noto como el sabor se me deshace en la boca y el sabor se expande por mi cuerpo

-De acuerdo- digo cogiendo las galletas y los panes- Voy a casa de Haymitch, lo dejo en la cocina y vuelvo a la panadería.

-Ya está, ¿algo más?

-Yo creo que nada más. Seguiré haciendo pan, galletas y pasteles. Tenemos muchos pedidos. -digo recordando mi conversación con mi madre.
-Bueno, pues luego vuelvo.

-Antes de salir, le digo, ¿estás seguro de que no quieres nada más?

-No de verdad muchas gracias, te lo agradezco, luego te veo.

Salgo de la panadería y me choco con Madge.

-Perdón no... no... te había visto, disculpa.

Los dos nos miramos un buen rato.

-Oye, lo de Peeta, es el domingo, vendrás, ¿verdad?

Ella me sigue mirando y no lo aguanto más, le agarro la cabeza y la beso, otra vez esa sensación de calor me recorre el cuerpo.

Me separo y empiezo a andar para irme.

-¿Eso es lo que vas a hacer siempre?- me pregunta- ¿Desde cuándo te gusto?

Me giro y la respondo- desde que me dí cuenta de que me importabas, no he parado de pensar en ti.
Ella me vuelve a besar y me dice- allí estaré y se va.

Yo me quedo un poco estupefacto, pero me animo y vuelvo a casa de Haymitch

*CONTINUO EN LA ALDEA DE LOS VENCEDORES*

Termino otra tanda de galletas y las glaseo. 'Serán suficientes para los que estén en casa de Haymitch'. Meto las galletas recién hechas en una caja y voy a la Aldea de los Vencedores.
*SIGO EN LA ALDEA DE LOS VENCEDORES*