Para la supervivencia

Una vez mas me salve de la muerte, aunque me dio mucha pena por los que tienen que ir porque estoy segura que morirán en el primer día en la arena y no lo digo por creída sino porque en nuestro distrito casi nunca gana y si gana fue por pura suerte o porque estaba bien alimentado y sabia algo de armas. Deje de pensar en ello y me concentre en lo mio, me mire en el espejo que esta mi cuarto y comienzo amarrarme el pelo para que no me moleste para cuando comience el trabajo, mientras me mire con el vestido que llevo puesto y pensé "Que aburrido vestido para ir al trabajo" después de eso fui a la cocina donde ahí me encuentro con mama con el desayuno.

- Buenos días mama ¿ Descansaste bien? - pregunte mientras me sentaba en la silla de frente, mientras tanto tomaba la leche y comía tostada con mermelada de sabor durazno - Buenos días Tanya y si, dormí mas relajada después de que paso la cosecha, pero me da lastima a quienes le tocaron ir - comento algo triste por ellos, entonces le agarro la mano y le hago caricias en el para que se sienta mejor - Mama, estaba pensando en ir a un distrito profesional para ser entrenada, por si me tocase ir a los juegos - comente tímida y suspirando de los nervios que tengo - ¿Que? De ningún modo iras a un distrito profesional Tanya, no quiero ni te dejare ir - comento en un tono enojado, esta claro que tampoco me agrada ir a un distrito profesional, pero ¿Que pasaría si me tocase ir al año que viene? - Mama, se que no quieres que vaya, pero debes entender que si no entreno este año es probable que me toque el año que viene - comente con toda la tranquilidad del mundo, aunque dentro mio moría de nervios.

Después de haber dicho ese comentario, mama empezó a razonar de que es lo mejor para mi entrenar en un distrito profesional. Se que sera duro para nosotras porque jamas nos habíamos separados, no después de la muerte de papa, que por cierto nos afecto tanto su perdida. De pronto veo que mama se le empieza a caer lagrimas y se seca con una servilleta, me levante de la silla rápidamente y la abrace con fuerza aunque también estoy llorando en este preciso momento, porque no se cuanto me ausentare.

- Mama, por favor no llores mas que harás que llore aun mas - suplicaba que dejara de llorar, lo cual me hizo caso y luego se levanto al mismo tiempo que me levante. Nos dedicamos otros abrazos fuertes - Eu, no es una despedida - murmure en su oído algo solloza, pero lo peor es que no se si este comentario que acabo de hacer, sea cierto. Ella asintió con la cabeza y me miro con esos ojos oscuros con lagrimas - Sera mejor que preparemos la mochila y también unas monedas que guardo por las necesitamos - comento ella, haciéndose la fuerte conmigo - Estoy de acuerdo con la mochila, pero en cuanto las monedas, no las necesito, tengo algunas ahorradas debajo de la cama - comente sonriendo un poco, mientras tanto con una mano me secaba las lagrimas que rondaba aun en mi rostro.

Continuara.