El parto de Sophie Mellark Cleaver

VIENE DEL ALA MELLARK SNOW

Llegamos al hospital, saco a Cashmere del coche y entro corriendo lo máximo que puedo al hospital y voy directamente a maternidad, sacan una camilla y ponen a Cash encima, me cuelgo entonces la bolsa bien y entro con ella cogiéndole la mano.

---Peeta, tienes que esperar. -Dice el doctor-

-¿Por que? 

--- La otra vez no tuvimos tiempo, esta vez hay que hacerle unas ultimas revisiones luego entrarás. -Responde-

Me quedo fuera, dando vueltas hasta que el doctor vuelve a salir.

----Vale Peeta, puedes entrar ya, vamos a empezar dentro de poco, solo tiene que dilatar un poco más y ya estara.

Asiento y entro en maternidad cuando veo llegar a Josh con Rose y el pequeño Josh, se sientan en la sala y me acerco a ellos y les abrazo, beso la frente del pequeño y abro la puerta de la sala, suspiro y trago una fuerte y larga bocanada de aire para luego entrar y ponerme una bata que me da el médico, mientras me acerco a Cash y le cojo de la mano.

-Estoy aqui, no voy a ir a ninguna parte. Respira. -Sonrio mientras cojo una venda humedecida para el sudor-

--Vale Cash, estas a diez ya, así que empezamos ahora, ya sabes como va. -Sonrie- ¿Lista? empuja.

----Peeta... -se corta la voz con un grito al empujar- 

-Tranquila no me muevo, respira tranquila y empuja, podemos hacerlo, podemos y vamos a hacerlo. -Hago una mueca al notar como me aprieta fuerte la mano, mientras va empujando-

No se el tiempo que pasa, es como si se detuviera, cuando oigo como el medico anuncia que la cabeza esta por salir. 

-- Solo un poco más, la cabeza ya esta asomando, vamos Cash, adelante, hazlo, solo un empujón más.

Respiro entrecortado jadeando 

-Pee... Peeta -murmuro dolorida- no puedo -sollozo y agarro tu mano con fuerza-.

--vamos Cash si que puede -me dice el médico y se me pone cara de dolor-.

--vamos amore, se que puedes -me dice Peeta mientras me besa la mano-.

Ante aquellos ánimos respiro hondo e intento concentrarme, sigo pensando que no puedo, pero se que no es así. Cojo todas las fuerza que puedo y doy un gran empujón ahogando un grito entre mis dientes. No puedo evitar llorar del dolor y jadear por el esfuerzo.

-- Venga Cash... Otro así vamos -me dice el médico-.

Pongo cara de desesperación a Peeta y empujo con fuerza de nuevo. 

--ya sale, ya sale -escucho decir al doctor y siento que ya no queda mucho más-. Vamos Cash, sólo unos poco más. -jadeo llorando y miro a Peeta-.

-no puedo.. -le murmuro dolorida-. No puedo más.. -le miro con pena, siento otro enorme dolor e inconscientemente doy otro empujón como los anteriores-.

--vamos que ya no queda nada -dice el médico en cierto tono alegre-.

-Venga vamos, ya esta medio cuerpo fuera, solo un esfuerzo más por favor, solo un esfuerzo más. 

La emocion me embriaga, mientras no puedo evitar alguna lagrimita al ver a mi niña salir de tu cuerpo, te seco el sudor y sigo animandote para que salga ya. 

-Vamos, empuja solo uno más como ese y sale solo faltan las piernas, vamos hazlo.

Te miro con cara de dolor y respiro rápido, cojo fuerzas y doy un último empujón, aunque este no me resulta tan doloroso. Siento que la pequeña sale y la presión en mi cuerpo desaparece. Caigo rendida sobre la camilla y me seco las lágrimas al oirla llorar.

-- Ya esta aquí Cash, tranquila, respira y relajate -me dice el médico sonriendo y se lleva a Sophie. Una enfermera me dice que debemos llevarme a descansar y a curarme, ya asiento y cojo la mano de Peeta-. Te amo -sonrio y le beso antes de quitarme las lágrimas de las mejillas, nos trae el médico a Sophie limpia y vestida y envuelta en una manta rosa. La veo y la cojo emocionando me de nuevo-.

-Mi niña -susurro acariciandole su manita y te dejo cogerla-. Ven en cuanto puedas por favor -beso la mano de Peeta y una enfermera me lleva en silla de ruedas a otra sala para curarme y lavarme-.

Llevaba unos dias inquieta, demasiado, hasta que sin querer o no se si queriendo, rompi esa bolsa de liquido y note como dejaba de nadar dentro de esta cueva, oií gritos, deben ser mami y papi y al cabo de unas horas una voces nuevas, comencé a oir voces, de  nuevo era la de papi, cuando le escuchaba animar a mami y note como algo me movia, yo no era, pero me movía en su interior, cuando derepente, algo me frenaba y salia más lentamente.

-Vale mami, -pense...- te ayudare -volvi a pensar-

me dejé mover, empujar y acabe por salir, lloré al hacerlo pero cuando pensaba que todo estaba bien, me alejan de ellos y luego... me entregan de nuevo, por la voz tiene que ser papi.

-Papiiiii -intento decir pero se que me es imposible-

Se que me acaricia la cara por que noto unos dedos cálidos en mi mejilla y me mantengo dormidita en sus brazos

Despues de que me des a Sophie, me paseo un rato por la sala, hasta que te llevan, luego me acompañan a la habitación y espero a que te traigan, con Sophie en brazos y acariciandole la carita con uno de mis dedos, para que note mis calidas manos. 

-Eres una preciosidad de princesa, eres perfecta mi pequeña. -Digo con ilusión-

Me cosen y lavan sin problemas y me cambian el camisón de hospital, me dan unas pastillas que casi al instante me reducen el dolor y, en silla de ruedas, me llevan a la habitación. Os veo y se me dibuja una enorme sonrisa.

--Cash, ahora descansa de acuerdo? -me dice la enfermera y me ayuda a ponerme en la camilla, se va y nos deja solos, veo que te acercas y miro a Sophie-.

-es preciosa -digo acariciando su mano y te miro-. Se parece a ti -digo riendo un poco-.

-Si que es preciosa, pero no... es identica a ti, mirala bien, es identica a ti mami. -Sonrío y te doy a Sophie- Un momento han dicho que tienes que descansar, prefieres descansar ahora o luego mami?

-Se me da aire, pero más a ti -sonrio y la cojo-. No tranquilo... Luego -sonrio y jugueteo con Sophie-. Me apetece estar con ella -la acaricio la manita mientras jugueteamos y te miro-.

-por cierto, ¿los niños? Me gustaría verlos -estiro la mano y cojo la tuya-.

-No amore, la  niña es identica a ti, tiene tu mismo pelo y tus ojos, los gemelos eran como los dos... ella es como tu. -sonrio un poco- Esta bien pero luego has de descansar, has hecho un gran esfuerzo. 

Cojo tu mano y sonrio- 

-En casa les pedi que se quedaran con ellos a los demás, mi  hermano y Rose estan fuera esperando.

Sonrio mientras te escucho

-Bueno... Puede ser. Pero a ti también se te parece mucho -sonrio-. Y claro.. Luego descansare. -te acaricio la mano y te la beso-.

-Ah! Vale. De acuerdo. Si no estamos mucho aquí... No hace falta traerles no? -te miro mientras jugueteo con la mano de Sophie-. Ah, están fuera? -sonrio-. Diles que pasen si quieres

-Vale amore ahora ire a decirselo. -Me acerco y te beso en la frente, no puedo parar de hacerle juegos a la pequeña, es como si me hubiera vuelto a despertar ese niño que nunca apareció con el secuestro de mi hermano- Si a ver, la niña debería comer ya, a ver si le cae bien, no se si es la hora...