El amanecer de un nuevo día en el Distrito 12

Amanece de nuevo, esta noche he podido dormir plácidamente, son las cuatro de la mañana y mi padre nos despierta a Taylor, Paylor y a mí, es la hora de ir a trabajar para luego ir a clase. Me levanto de un salto de la cama y ayudo a mi hermano pequeño a vestirse, a pesar de tener 12 años, parece más joven y la verdad soy un poco protector con él, salimos al comedor y tomamos el desayuno, como cada mañana tomamos el pan rancio que sobró en la panadería, al cabo de unos minutos bajamos de la casa y entramos en la panadería. Mientras mis hermanos preparan el horno yo bajo al sótano y subo unos sacos de harina, a pesar de que Payton es más fuerte que yo, prefiero hacerlo por mi mismo y que el ayude a mi hermano, además eso me ha dado una constitución fuerte, bastante fuerte para alguien de mi edad y más en este Distrito, el segundo más pobre de todo Panem.

Cuando acabo con los sacos de harina ayudo a mi padre y a mis hermanos, hacemos la pasta y la amasamos todos juntos, el buen humor está a la vuelta de la esquina, al menos hasta que baja mi madre. Ponemos unas cuantas galletas y bollos en el horno, al cabo de veinte minutos lo sacamos y me dedico a glasearlas, una vez que estan listas las dejo enfriar y preparamos los panes.

-Peeta, recuerda que debes hacer los pedidos esta mañana antes de ir a clase. -Dice mi padre-

-Por supuesto papá, lo tengo ya previsto.

Cada mañana hago el mismo trayecto, primero los vecinos de la zona comercial, despues me acerco al edificio de la justicia y al ayuntamiento, posteriormente a la casa del Alcalde, donde vive Madge Undersee, esta chica va a clase conmigo y con Katniss, es la única que ha conseguido hacer amistad con ella, quizás por que es como Katniss, en el sentido que es más tímida como ella, pero me resulta simpatica, al menos alguien me habla, y esa es ella.

Acabo el glaseado y lo dejo enfriar del todo, mientras tanto preparamos los pedidos. Mis hermanos están acabando los pasteles, que tengo que llevar a la casa de Madge. ya son las seis de la mañana y el horno va viento en popa, los panes van saliendo rápido y esta mañana mi madre todavía no ha bajado, así que el buen humor perdura durante toda la madrugada y parte de la mañana , por primera vez en días estamos pasándolo bien trabajando aquí.

Son casi las siete y mi padre decide abrir, decido salir y llevar el pan a la gente, estoy seguro que no molestará a nadie ya que los hombres y otros chicos iran a trabajar a la mina de carbón de nuestro distrito, así que la gente ya estará levantada. Tomo las bandejas de pasteles y los panes, decido acercarme lo primero de todo a casa de Madge.

-Salgo ya Papá.

-Esta bien Peeta, vete.

Me dirijo lo primero de todo a casa de Madge y toco a su puerta trasera.

Haymitch se gira y vuelve hacia el Distrito 12, me ha caido símpatico, así que cuando vuelva le llevaré algunos panes, pero antes debo acabar de repartir el resto del pan, y si no me equivoco un día de estos deberé irme al Distrito 4... que recuerdos y que buena amistad hice ahí, Jason D. Muhler, jamás pensé que haría un amigo fuera de estas alambradas, pero el encuentro con él me llenó de ilusión. En ese momento oigo la pizpireta voz de Madge, pensaba que aun estaría dormida, pero veo que ya está preparada para irse a la escuela.

-Hola Madge.

-Hola Peeta, pasa.

Entro en la casa y me dirijo a la cocina, ella me viene pisando los talones, aunque es tímida es una chica muy simpática. Al entrar en la cocina veo al Alcalde Undersee y a su mujer. Suelto las bandejas de pan y galletas sobre la mesa y también una bandeja de pasteles.

-¡Buenos días! -Saludo sonriendo- Oye Madge, seguramente en un par de días me vaya de nuevo al Distrito 4 a pasar unos cuantos días con mi amigo, ¿quieres algo de ahí?

Ella me mira dubitativa, se que no les hace mucha gracia cuando dejo el Distrito 12, ya que suele venir mi hermano pequeño a realizar mis trabajos, y debe venir un par de veces cada día, no es tan fuerte como yo ni como mi hermano así que no puede cargar tanto como cargo yo.

-¿Estas preparada muy pronto no? -Digo fijándome que como cada día lleva ese Sinsajo de oro prendido en el vestido. Con ese sinsajo se podría alimentar a toda una familia durante toda la vida....-

Veo como la madre de Madge va hacia un cuarto retirado, irá a por el dinero del pedido.

Veo a Haymitch pasar por una de las ventanas de la casa del Alcalde cargado con una maleta de mano, por lo visto se va del Distrito, irá por trabajo a otro de ellos.

Mientras tanto Madge se sienta en la mesa y no me devuelve respuesta al tema de si quiere algo del Distrito 4, en ese momento oigo tocar de nuevo a la puerta de la casa del Alcalde y Madge se levanta de nuevo y abre la puerta. Es Paylor.

-¿Paylor? ¿Que demonios....? -Le digo-

-Peeta dice papá, que han llamado los padres de Jason, te necesitamos en la panadería cuanto antes, has de partir al Distrito 4 para llevarles un nuevo pedido de panes a su tienda.

Mis ojos se iluminan de ilusión y alegría, Jason es uno de mis amigos del Distrito profesional 4, es genial, pasaré unos cuantos y largos días con mis amigos, además la última vez que fui me dijo que me presentaría a dos amigos suyos también de ese distrito.

-Está bien Paylor acabo los repartos y voy para allá. Díselo a papá.

Me giro a Madge y le digo:

-Bueno MAdge ¿podrías avisar a clase que estos días no iré? Te prometo que al volver intentare traerte algo para ti. -y le sonrío-

Ella asiente. Entra su madre y me da el dinero.

-Gracias señora Undersee. -Respondo y salgo de la casa tomando el resto de bandejas-

Una vez fuera me detengo en las casas de los vecinos y en el Edificio de Justicia, donde el Jefe Cray me espera para recoger su pedido de pan a nuestra panaderia, al cabo de una hora llego y me dispongo a ayudar para preparar el pedido del Distrito 4.


CONTINUA EN DISTRITO 4, LA ZONA COMERCIAL